Capítulo 21

“Te quiero”: Ferit abre su corazón a Seyran y el deseo entre ellos es más fuerte que nunca

El amor entre ellos ha sido real todo este tiempo y, aunque el futuro esté lleno de incertidumbre, no pueden seguir ignorando lo que sienten.

Ferit y Seyran

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Una noche más en la mansión, Ferit estaba acostado en el sofá y Seyran en la cama. Después de un rato en silencio, le ha dicho que estar ahí le resultaba muy incómodo, y le ha preguntado si podía dormir con ella en la cama.

Seyran, sonriendo, ha accedido y le ha dicho que sí. El joven, lleno de alegría, no ha podido esconder su emoción, aunque Seyran le ha recordado que tiene que respetarla. En ese momento, él ha respondido que, al fin y al cabo, se despertaron juntos abrazados en la cabaña y que no le importaría repetirlo.

Mientras se miraban, Ferit le ha preguntado cuándo cree que podrán dormir abrazados, como pareja. Seyran, pensativa, le ha respondido que tendrá que esforzarse, que debe hacerle creer que la quiere de verdad.

Con lágrimas en los ojos, Ferit, mirándola, le ha dicho que la quiere, y se ha acercado para darle un beso. Sin embargo, ella, recordando las palabras de Pelin, ha sentido miedo. Justo cuando iba a besarla, Seyran se ha apartado y se ha dado la vuelta, diciendo: “Tendrás que esforzarte mucho más. No me dejaré engañar por palabras bonitas”.

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El arrepentimiento de Uras remueve a Seren: “Por un momento vi al hombre del que me enamoré”

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La decisión de Uras de no firmar la denuncia ha dejado a Seren en shock. Entre el orgullo, la rabia y el cansancio, la doctora ha confesado a Bahar que por un momento volvió a reconocer a su marido, aunque el divorcio parece inminente.

El duro conflicto de Bahar como madre: ¿fue justo echar a Uras de casa tras la traición a Seren?

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Defendió a su nuera sin dudarlo y echó a su hijo de casa, pero el peso de esa decisión no la deja dormir. ¿Puede una madre dejar solo a su hijo aunque tenga motivos?