José Antonio de 71 años estaba bañándose en una playa de Comarruga en Tarragona cuando se dio cuenta de que no podía regresar a la orilla, se dio por vencido y justo cuando empezaba a hundirse un hombre francés le agarró de los brazos y logró sacarlo hasta la orilla salvándole la vida.
Tras el accidente pasó tres días en la UCI recuperándose, cuando salió del hospital su única intención era poder encontrarse con su salvador para darle las gracias. Incluso llegó a escribirle una carta al presidente de la república francesa.
Un año después ambos volvieron a reencontrarse por casualidad en la misma playa y José Antonio tuvo la oportunidad de agradecer a su ángel de la guarda que le salvara la vida.