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RETRATO DE DESNUDOS COLECTIVOS

Spencer Tunick desnuda a un millar de personas en el Mar Muerto

El artista estadounidense Spencer Tunick, famoso por sus retratos de desnudos colectivos, ha fotografiado a un millar de personas sin ropa y a la luz del amanecer en la orilla israelí del Mar Muerto, el lugar más bajo del planeta.

El fotógrafo de desnudos colectivos, Spencer Tunick, ha retratado a un millar de personas sin ropa en la orilla del Mar Muerto, en Israel.

"Esta mañana vosotros también sois artistas", dijo Tunick a los participantes cuando la oscuridad de la noche todavía inundaba la playa, situada cerca de la localidad de Ein Gedi.

La sesión comenzó con un cuidadoso chapuzón multitudinario en el mar, cuya alta concentración en sal hace que los cuerpos floten sin esfuerzo. Tunick pidió a los voluntarios, en su mayoría jóvenes, que se pusieran de espaldas, en dirección a la costa jordana, y luego que recrearan la inevitable instantánea turística flotando de espaldas a más de cuatrocientos metros bajo el nivel del mar.

"Amo Israel y hago esto por salvar el Mar Muerto, que en cincuenta años podría desaparecer", afirmó el creador neoyorquino, que destacó que se trata del "único país de Oriente Medio donde se puede efectuar este trabajo".

La belleza del entorno y de la composición humana se vieron enturbiados por el ruido que causaba el sobrevuelo constante de avionetas y paracaídas motorizados, algo de lo que se quejaron a la prensa algunos de los participantes, ya con la ropa puesta.

Uno de ellos, Guilad Limor, es un israelí residente en Londres que ha participado en 14 de las 75 instalaciones que ha efectuado Tunick desde los años noventa.

"Sentí una necesidad muy especial de estar aquí. Él me lo pidió personalmente hace unos meses. Me dijo 'Te quiero allá, te quiero en Israel conmigo'. Aplacé una visita a mi familia que tenía prevista para julio para poder participar", cuenta con la toalla al hombro.

Controversia política en Israel
Tunick recaudó el dinero a través de internet para cumplir un proyecto con el que soñaba desde sus inicios como artista. Más de setecientas personas respondieron al llamamiento y aportaron en total 116.000 dólares (84.000 euros).

Su propósito inicial era tomar las imágenes en el puerto de Tel Aviv, pero los costes y la polémica le hicieron cambiar de opinión. De hecho, el nombre de la playa donde finalmente se tomaron las imágenes fue mantenido en secreto hasta el último minuto incluso para quienes estaban dispuestos a entrar al agua como salieron del vientre materno.

Para evitar filtraciones, modelos y periodistas fueron transportados de madrugada en una veintena de autobuses a un lugar del que sólo sabían entonces que se encontraba en el Mar Muerto. Y es que el desnudo masivo venía cargado de polémica, tras las duras declaraciones de los sectores más intolerantes del Estado judío.

El diputado Zevulu Orlev, de la formación ultranacionalista Habait Hayeudí, recurrió a una imagen bíblica para clamar contra lo que definió como una "Sodoma y Gomorra" fotográfica. 

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