La Guardia Civil ha interceptado un submarino con 3.000 kilos de cocaína de gran pureza en la playa de Hio, localizada en el municipio pontevedrés de Cangas de Morrazo.
Dos de los tripulantes de la embarcación han sido arrestados, mientras que el tercero ha logrado huir del lugar de los hechos. Los investigadores intentan aclarar si el submarino, que procedía de un país latinoamericano, venía cargado o bien la droga fue introducida en alta mar.
Mientras, las autoridades siguen intentando reflotar el submarino que ha quedado hundido. Se trata de un sistema de transporte de droga muy novedoso en Europa, aunque es habitual en América, han precisado las fuentes.
No es la primera vez que los narcos usan sumergibles para transportar la droga. Aunque no han trascendido más detalles, fuentes de la investigación han indicado que los detenidos son de origen ecuatoriano.
El método de los narcosubmarinos
Los narcosubmarinos cada vez son más usados en Sudamérica. De hecho el interceptado este domingo procedía de allí. Tienen 20 metros de eslora y suelen navegar con temporales para burlar la vigilancia aduanera.
Los narcos han llegado a usarlos eléctricos, como aquellos con los que los cárteles se movían por el Amazonas con la cocaína oculta.
Sin embargo, es la primera vez que en España se localiza uno transoceánico, que ha logrado cruzar el charco saltando todos los controles hasta llegar a Galicia, donde su viaje se acabó.
Ahora está hundido bajo aguas gallegas con la droga dentro y el operativo que estaba con el carguero encallado en Ares se ha desplazado para reflotarlo.
Los narcos buscan nuevas maneras de transportar la droga, aunque también España ha recibido ayuda de submarinos estadounidenses para perseguir a los traficantes.
