Las causas más comunes de los incendios como el que se originó en el edificio de Valencia

Valencia sigue sobrecogida tras el incendio que este jueves asoló un bloque de pisos y acabó con la vida de diez personas. A primera hora de este domingo los operarios municipales continuaban las tareas de limpieza y retirada de ceniza y residuos quemados y ramas que empezaron el sábado.

Tras una tragedia como la de Valencia, nos preguntamos qué debemos hacer si nos ocurre algo así. En esta ocasión, ha sorprendido la rapidez con la que se propagó y que fuera a través de la fachada. Son más comunes los incendios en el interior de las viviendas.

Para que se origine un incendio tiene que haber una fuente térmica que lo origine, y en ocasiones la causa son las acciones más cotidianas. Entre las más comunes las relacionadas con la cocina.

Es importante tener en cuenta cosas tan básicas como que no debemos echar agua en una sartén si hay aceite caliente. Siempre que sea posible debemos poner una tapa a la sartén para acabar con el fuego.

Estufas, braseros o regletas de enchufes también pueden originar llamas. Entre los motivos más comunes que no estén homologados o que sobre carguen el suministro. También ocurre con las baterías. Los bomberos alertan que están recibiendo muchos avisos por patinetes eléctricos. Pero si se origina un incendio en nuestra vivienda, lo mejor, cerrar todas las puertas.

Para aumentar la seguridad, recomiendan la instalación de un detector de humo. Un simple aparato que puede salvar vidas.

Análisis antropológicos de los cuerpos

Los juzgados de Valencia están a la espera de los resultados de los análisis de ADN, y en algunos casos de los estudios antropológicos, de los cadáveres rescatados entre el viernes por la tarde y este sábado por la mañana.

Muchos de los afectados por el incendio se encuentran permanecen realojados en un hotel. Se espera que a partir de esta próxima semana las 131 viviendas del edificio que el Ayuntamiento de Valencia ha puesto a su disposición puedan estar disponibles.

Además, los propietarios buscan que los inmuebles sean declarados zona catastrófica porque "es lo que es, una catástrofe", lo que supondría recibir indemnizaciones mayores por los daños ocasionados.

A la espera de los informes técnicos que dictaminen si la finca está o no en ruina, por ahora sigue existiendo una comunidad de propietarios, que además mantiene la titularidad de los garajes, que "están intactos", y del suelo donde se levantan los inmuebles afectados.

Los propietarios, un total de 138 porque varios disponen de varias viviendas, también abogan por constituir su propia asociación para gestionar las reclamaciones. Para que se declare la finca en ruina, los técnicos deben constatar o bien que la reconstrucción no es posible o bien que esa reconstrucción afecta a más del 50 % del valor del seguro del inmueble.

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