Volcán La Palma

La angustia de muchos desalojados en La Palma, que no sabe si la lava del volcán destruyó sus viviendas o no

Tras la erupción del Volcán de Cumbre Vieja en La Palma, las coladas de lava han ido arrasando la zona, afectando a más de 500 construcciones, de las que 450 viviendas ya se dan por destruidas.

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El balance de pérdidas tras la erupción del Volcán de Cumbre Vieja en La Palma todavía no está cerrado pero una semana después se calcula que la lava ha afectado a cerca de 500 construcciones, de las que 450 se dan ya por destruidas. Pero muchos vecinos desalojados aún no saben si sus casas siguen o no en pie.

Este es el caso de los pueblos que se encuentran al otro lado de la colada sur. A estos pueblos no se puede acceder porque allí es donde se abrió la primera boca en Cabeza de Vaca. Para llegar hasta allí hay que rodear toda la isla y además el dispositivo de seguridad es mayor en esta zona por el riesgo que entraña.

Los habitantes de estos pueblos, que salieron después de la erupción, solo pudieron regresar el miércoles para recoger sus cosas. Según cuentan los palmeros, el paisaje que vieron allí es desolador, todo está cubierto de ceniza, y desde entonces viven con la incertidumbre de saber qué está pasando con sus casas, si la lava ha llegado ya hasta ellas.

"No sé si mi casa sigue en pie"

Maribel, es una de las muchas afectadas por el volcán. Su casa se encontraba a escasos metros de la primera boca del volcán, pero al otro lado de la colada, por lo que no conoce cuál será el estado de su vivienda. "Nadie sabe de sus casas por ahí. No sé si mi casa sigue en pie", afirma para Antena 3 Noticias.

Frente a esta situación, Maribel y su marido tuvieron que dormir un par de noches en su coche, junto a sus dos perras, y ahora se alojan en una vivienda en obras, donde le habilitaron una habitación.

Al igual que ella, el resto de vecinos evacuados salieron con lo puesto tras la erupción del Volcán de Cumbre Vieja el pasado domingo. Los días pasan y los palmeros intentan reconstruir sus vidas, unas vidas que han quedado bajo la lava.

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