Un niño de 9 años mata a cinco personas en un incendio en EEUU

Un niño de nueve años ha sido acusado de asesinato tras provocar un incendio en un parque de caravanas y causar la muerte de tres niños y dos adultos. Los niños falelcidos tenían 1 y 2 años y los adultos, 34 y 69 años.

El forense del condado ha declarado que el incendio fue intencionado, por lo que ha acusado al menor de asesinato en primer grado, de incendio premeditado y un cargo de incendio premeditado agravado. Según ha declarado Greg Minger, el fiscal del condado de Woodford, "dada la edad, la libertad condicional es el único resultado que podría obtener". Según Minger, el niño podría ser puesto en libertad condicional por al menos cinco años, pero no más allá de los 21 años. Debido a la edad del menor, no se han relevado datos sobre su identidad ni información sobre su relación con los fallecidos.

Katrina Alwood y su hijo de ocho años, que se encontraban en el lugar durante el suceso, se pudieron salvar gracias al trabajo de los bomberos, según afirman las autoridades. Alwood, que estaba comprometida con una de las víctimas, ha sido trasladada junto a su hijo al hospital de Peoria. Todos los involucrados en el suceso pertenecían a la misma familia. Las autopsias de los cinco fallecidos indican que las muertes fueron ocasionadas por inhalación de humo.

Según ha explicado Gus Kustopoulos, un exfiscal que se convirió en Defensor juvenil en Chicago, "el desafío para los fiscales se basará en demostrar que el niño tenía intención de matar". Betsy Clark, presidenta de la Iniciativa de Justicia Juvenil, ha declarado que "los cargos están fuera de lugar, especialmente por el desarrollo cerebral de los niños". Clark ha señalado también que la responsabilidad penal en muchos países, como Alemania, es de 9 años.