Atentados París

París, diez años después del mayor baño de sangre terrorista de su historia

Se cumplen 10 años del atentado más letal de Francia. El 13 de noviembre de 2015 se escribió una de las páginas más tristes del París actual.

Aniversario de los atentados de París

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El rock dejó de sonar en París poco después de las 21:30 horas del 13 de noviembre de 2015. Era viernes y la noche parisina bullía. Nada hacía presagiar el silencio sepulcral que se impondría desde entonces y durante muchas noches en Francia.

En una acción perfectamente coordinada , tres comandos de nueve terroristas con armas automáticas y cinturones explosivos asesinaron a bocajarro a 130 personas e hirieron a otras 350. Toda una masacre cometida entre las 21:20 horas y la 01:40 horas de aquel viernes negro.

Francia y Alemania disputaban sus primeros minutos de juego de un partido amistoso en el Estadio Nacional. A las afueras, dos terroristas suicidas se inmolaron con 10 minutos de diferencia. Menos de media hora después hizo lo mismo un tercer atacante.

En ese momento el horror ya se había instalado en el centro de la capital francesa, en el distrito 10. Hombres armados disparaban contra las personas que disfrutaban hasta ese momento de una tranquila velada. La sangre se fue extendiendo por distintas terrazas y restaurantes hasta el distrito 11 con más ataques. Las calles de París se había transformado en una macabra trinchera donde la gente perdía la vida en un suspiro.

A las 21:49 horas comenzó el plato fuerte de esta oleada de atentados. En un símbolo de la cultura y el ocio para Francia, la sala Bataclán tres terroristas abrieron fuego en medio del concierto de la banda estadounidense 'Eagles of Death Metal'. Su rock no pudo disimular los disparos ante el pánico y desconcierto de los 1.500 asistentes. Las autoridades abatieron a uno de los atacantes, pero los otros dos se atrincheraron con rehenes. Tras intentar negociar con ellos alrededor de las 00:18 horas de esa noche letal las fuerzas francesas asaltaron a los dos terroristas que tenían como asistentes.

"Que se muera en la cárcel"

Antena 3 Noticias ha hablado con Cristina, la madre de Juan Alberto González, uno de los dos españoles asesinados en el concierto. Diez años después "el vacío y el dolor" sigue siendo "tan grande". Su hijo vivía en la capital francesa y cuando se enteraron de la noticia mantuvieron la esperanza hasta el último momento de que él no fuese uno de las víctimas. Desde entonces, cada 13 de noviembre van al homenaje que se celebra. "Es como un punto de conexión. Son bastante respetuosos, te dejan solo en la sala, nadie te agobia, ni está allí encima tuya. Te dejan solo y te sientes en el silencio. Es como si lo sintieras".

Cuando se le pregunta por el único terrorista Salah Abdeslam que sigue vivo, Cristina no duda: "Mi deseo es que no pise la calle, que no tenga libertad en la vida y que se muera en la cárcel. Eso sería para mí lo justo. Lo mismo que él ha ayudado a matar a 130 personas no tiene derecho ni a 5 minutos de libertad".

Los de aquella noche fueron los atentados más letales desde la II Guerra Mundial. Estadios, cafés y una sala de concierto. Esa noche, el Estado Islámico que se atribuyó la autoría no solo atentó contra Francia, atentó contra el modelo de vida occidental, atacó el ocio, la diversión y lo que ellos consideran el pecado de un estilo de vida europeo.

Y una década después las secuelas de ese atentado siguen presentes, pero cierto es que los terroristas no consiguieron atemorizar a una población que sigue viviendo su vida bajo el estilo europeo.

El presidente galo en aquel entonces Francois Hollande resistió el sangriento ataque incluso su popularidad que nunca estuvo en máximos repuntó tras su gestión. Sin embargo, en 2016 anunció que no iba a presentarse a la reelección.

10 años después del horror

Su sillón lo ocupó en 2017 Emmanuel Macron y lo que no se evidenció en los años posteriores a los ataques fue quedando palpable con el tiempo. Y la unidad del 2015 se fue disipando hasta tener una Francia polarizada en la que aunque la intensidad de los atentados ha bajado mucho los valores no parecen los mismos.

2015 fue un año muy duro en Francia que, en solo nueve meses tuvo que reponerse de tres atentados masivos. El 7 de enero marcó el principio de una oscura década para el país vecino. 12 personas perdieron la vida en el semanario satírico 'Charlie Hebdo'.

En julio de 2016, 86 personas murieron y otras cientos resultaron heridas en Niza por un conductor suicida.

Desde entonces ha habido que hacer frente a una pandemia, a volver a tener la guerra en las puertas de Europa, a la guerra entre Israel y Gaza y a una creciente presión migratoria que ha incrementado el papel de la extrema derecha.

Las secuelas psicológicas fueron visibles desde muy pronto. Cuatro años después de los ataques una encuesta indicaba que el 54% de las personas que perdieron a un ser querido sufría trastorno de estrés postraumático y el 49% padecía depresión grave. Otras encuestas publicadas en la década siguiente indicaban que en 2020 el 93% de la población francesa creía que podía producirse otro ataque parecido, ese miedo habría bajado ahora al 60%.

Precisamente esta semana, Fiscalía Antiterrorista de Francia informaba de que tres personas habían sido detenidas por su supuesta implicación en la entrega de una memoria USB a Salah Abdeslam, que fue condenado a cadena perpetua.

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