Tailandia

Un padre es acusado de matar a su hija y acaba confesando el asesinato de otros cuatro hijos

El sospechoso habría atribuido sus crímenes a "diversas enfermedades mentales".

Policías de Tailandia poniendo un cordón policial

Policías de Tailandia poniendo un cordón policialReuters

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Un hombre de 46 años fue arrestado el pasado 10 de septiembre por el supuesto asesinato de su hija de tan solo dos años en Tailandia. Una vez detenido, durante un interrogatorio que le ha hecho la Policía, ha confesado haber matado a otros cuatro de sus hijos, según han informado medios locales.

La Policía tailandesa fue alertada sobre un posible caso de maltrato infantil. Entonces, varios agentes se desplazaron al local de la familia y encontraron a dos niñas encerradas en el baño. Las menores presentaban señales de agresión, así que se puso en marcha la búsqueda de la pareja. Horas después, se arrestó al sospechoso, identificado como Songsak, junto a su mujer, Sunan, en el distrito de Bangk Khen de Bangkok.

Songsak es padre de diez hijos de entre seis meses y 22 años, frutos de su relación con cuatro mujeres. Una vez en la comisaría, el hombre confesó haber matado el pasado mes de mayo a su hija, de solamente dos años. El cuerpo de esta niña fue encontrado por varios agentes de Policía la noche del pasado martes enterrado en el área de la cocina de una propiedad rural situada en el centro de Tailandia, según indicaron fuentes policiales.

Mató a otros cuatro hijos

El hombre también ha terminado admitiendo que mató a otros cuatro de sus hijos, entre 2013 y 2018. Los cadáveres de estos pequeños habrían sido arrojados en diferentes partes de Bangkok, por lo que las autoridades han montado un grupo de intentar localizar los cuerpos, según medios locales.

Por su parte, el comisario de la división dos de la Oficina de la Policía Metropolitana, Atthaphol Anusit, ha expresado en declaraciones a los periodistas locales que tanto Songsak como dos de las madres de los pequeños ya habían sido denunciados anteriormente por vecinos por la violencia doméstica y abusos contra los niños. El sospechoso habría atribuido sus crímenes a "diversas enfermedades mentales".

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