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DOMODEDOVO | ATENTADO EN MOSCÚ

Muertos y heridos se confundían en los pasillos del aeropuerto

35 muertos y mas de un centenar de heridos ha dejado el atentado perpetrado por una mujer que iba acompañada de un hombre con rasgos caucásicos.

35 muertos y mas de un centenar de heridos ha dejado el atentado perpetrado en el aeropuerto de domededovo por una mujer que iba acompañada de un hombre con rasgos caucásicos. El Presidente Medvedev exige responsabilidades a la dirección del aeropuerto de Moscú por la falta de seguridad.

Varios heridos esperan asistencia a las puertas del aeródromo, algunos en el suelo, otros sobre los carros para equipajes, al entrar en la terminal, el rastro de sangre nos conduce hasta el lugar de la explosión.  Acaba de ocurrir hace sólo unos minutos y la polvareda aún se mantiene. Muertos y heridos se confunden en los pasillos donde la mayoría han sido alcanzados por la metralla, entrada la noche, los servicios médicos siguen retirando cadáveres.

Esta mañana, unas flores recuerdan que aquí muerieron viajeros que llegaban, familiares y amigos que esperaban y taxistas buscando clientes. "Lo que ocurrió ayer no lo olvidaremos, pero realmente hoy no tengo miedo" comenta un viajero en el aeropuerto "Se ve mucha seguridad, no creo que haya más amenazas" asegura otro.

La actividad ha vuelto al aeropuerto con más tránsito de Moscú mientras la investigación se centra en localizar los restos de una mujer: una terrorista kamikaze, acompañada por un hombre del que han encontrado su cabeza. Llevaban una mochila que explotó antes de tiempo. La forma de atentar recuerda a los ataques en el metro hace menos de un año y al secuestro del teatro Dubrovka en 2002.

Entre sus autores, las llamadas viudas negras: mujeres, hijas o hermanas de los rebeldes del Norte del Cáucaso. Por sus familiares muertos en la guerra de Chechenia son capaces de morir. Ensayan actos suicidas, aprenden a ocultar y a detonar bombas y son fieles a su idea de independizarse de Rusia, cueste lo que cueste.

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