Cirugía estética
La influencer brasileña Juju do Pix inicia su reconstrucción facial tras las secuelas de una cirugía clandestina en 2017
Ocho años después de sufrir una deformación causada por rellenos ilegales, Juju do Pix ha comenzado su recuperación con una primera cirugía reconstructiva en São Paulo.

Publicidad
La influencer brasileña Juliana Oliveira, conocida en redes sociales como Juju do Pix, ha iniciado en 2025 un delicado proceso de reconstrucción facial tras casi ocho años de convivir con las secuelas provocadas por un procedimiento estético clandestino al que se sometió en 2017. Su caso, ampliamente difundido en los últimos días, ha generado impacto internacional tanto por la gravedad de las lesiones como por el contexto social que lo rodea.
¿Qué le sucedió?
En aquel entonces, Oliveira buscaba feminizar sus facciones mediante rellenos faciales. Sin embargo, la clínica a la que acudió le inyectó 21 jeringas de aceite mineral e incluso laxantes, sustancias totalmente inadecuadas y prohibidas para uso estético. El material infiltrado le provocó una deformación progresiva del rostro: endurecimiento del tejido, inflamación crónica, cambios drásticos en mejillas, mentón y mandíbula, y dolor frecuente. La situación afectó también su vida emocional y profesional; la influencer ha relatado que sufrió rechazo social, dificultades laborales y una profunda afectación psicológica.
En junio de 2025, tras años de búsqueda de ayuda y gracias a donaciones de sus seguidores, logró someterse a una primera cirugía reconstructiva en São Paulo. El procedimiento fue realizado sin coste por el cirujano Thiago Marra en el Hospital Indianópolis. La intervención, que duró unas cuatro horas, consistió en la extracción parcial del material extraño y del tejido afectado. Los médicos explicaron que parte del aceite mineral se había endurecido y encapsulado dentro de la piel, lo que complicaba su retirada.
El cirujano subrayó que no era posible eliminar todo el material en una sola operación, ya que hacerlo comprometería el riego sanguíneo del rostro y aumentaría el riesgo de necrosis, una lesión que podría significar la pérdida de tejido. Por ello, el plan médico contempla una reconstrucción en fases; primero retirar los segmentos más inestables, permitir una recuperación progresiva y, posteriormente, evaluar nuevas intervenciones para mejorar la forma facial y restaurar la simetría.
Evolución del caso
La propia Oliveira ha compartido parte del proceso en redes sociales, mostrando imágenes del antes y después de la primera operación. Aunque el cambio aún es inicial, se ha convertido en un símbolo de resiliencia y en portavoz involuntaria de los riesgos de la medicina estética clandestina. Sus publicaciones han recibido miles de mensajes de apoyo, y su historia ha reabierto el debate sobre el acceso seguro a procedimientos estéticos, especialmente entre personas trans o en situación de vulnerabilidad económica.
Expertos consultados por distintos medios han advertido que casos como este no son aislados y que el uso de sustancias no autorizadas, como aceites, biopolímeros o compuestos industriales, puede dejar secuelas permanentes e incluso comprometer la vida del paciente. Aun así, destacan que la reconstrucción, aunque compleja, puede mejorar la calidad de vida física y emocional del afectado.
Para Oliveira, el camino comienza ahora. Su recuperación dependerá de cómo responda su piel a las primeras intervenciones y de la planificación de cirugías futuras. Sin embargo, su caso ya ha logrado generar conciencia, alertar sobre los peligros de prácticas clandestinas y movilizar solidaridad a nivel internacional.
Más Noticias
-
Venezuela da un ultimátum a las aerolíneas: deben reanudar los vuelos antes del miércoles o perderán permisos
-
Maduro anima a defender Venezuela y Trump insiste: "Las cosas se pueden hacer por las buenas o por las malas”
-
Vídeo: El 'sobrecogedor' momento de una madre mientras carga a su bebé flotando en las inundaciones
Síguenos en nuestro canal de WhatsAppy no te pierdas la última hora y toda la actualidad en nuestro perfil de Google.
Publicidad









