Ucrania

El drama de los ucranianos en España: "Si no me manda mensajes, me vuelvo loca"

Cerca de 300.000 los ucranianos viven en nuestro país. La mayoría han buscado aquí refugio tras la invasión rusa que ha destruido un importante número de localidades y ha ocupado una nada desdeñable parte de su territorio.

Publicidad

Volodímir, Nela y Katerina son tres de los 300.000 ucranianos que viven en España. Se cumplen dos años desde que se inició la invasión de Rusia. Preguntamos a Volodímir, quien lleva veinte años residiendo en nuestro país, cómo ve la situación. "Mal porque muere mi gente, mis soldados, mi pueblo. Rusia va a destruir todos los pueblos enteros, como Mariúpol", contesta.

Nela vive en España desde hace 23 años y acude todos los días que puede a protestar frente a la Embajada de Rusia. "Mi hijo está ahora allí como militar. Me manda mensajes, si no me manda, me vuelvo loca", comenta.

El ejército necesita uregentemente nuevos reclutas para rotar a las cansadas tropas

Desde que comenzó la invasión, Katerina ha recogido todo tipo de ayuda en el supermercado Ucramarket, incluso se ha enviado una ambulancia repleta de víveres. Aunque dos años después nota cansancio en ese apoyo y su tienda se ha convertido en un auténtico termómetro sociológico a través de sus clientes. "Pues los ucranianos están bastante cabreados porque les duele. Los rusos, no tocan ese tema para nada", afirma Katerina.

Frente de la embajada de Rusia en España, los ucranianos residentes en nuestro país han organizado su particular Maidán, la emblemática plaza de Kiev. Dos años después de que comenzase la invasión, estas personas temen que flojee la ayuda internacional. Según ellos, este apoyo es fundamental para lograr la victoria final de Ucrania.

"Al fin y al cabo somos barrera entre Europa y Rusia. Si cae Ucrania, qué va a pasar luego?", añade Katerina. "Con ayuda de nuestros aliados creo que vamos a ganar", Confía Volodímir. "Yo sé que algún día tiene que parar esta guerra y tenemos que decir basta", concluye optimista Nela.

A pesar de las dificultades, los ucranianos en el extranjero confían en una victoria final de su país

Publicidad