Australia endurece las medidas contra la COVID-19 y Sídney se mantiene en confinamiento un mes más

Australia extiende un mes más el confinamiento en la capital de Nueva Gales del Sur, Sídney, que está siendo la más afectada por el nuevo repunte de casos de coronavirus en el país. La variante Delta azotó al país a finales de junio y la situación no mejora ni aumentando las restricciones para frenar la expansión del virus.

Tan solo ha hecho falta un brote de apenas 50 casos para romper con la rutina de Sídney. Centros comerciales, tiendas, pequeñas, pubs, restaurantes...todos volvieron a echar el cierre. Los habitantes solo tienen permitido salir de casa para actividades esenciales como salir a trabajar aquellos que no puedan hacerlo desde casa o acudir a hacer la compra o al médico. Una medida que se mantendrá al menos 30 días más y que está empezando a provocar un malestar generalizado en el país.

En los últimos días, miles de personas han salido a las calles para protestar contra la gestión del Gobierno porque no entienden las estrictas condiciones a las que deben hacer frente y critican que además de esto, que el ritmo de vacunación está paralizado, lo que no ayuda a frenar los nuevos positivos en el país. "Los casos van a subir y bajar siempre pero tiene que haber otras soluciones", explica un vecino. Otros, se quejan de que no pueden hacer frente a los gastos habituales porque se les obliga a cerrar su negocio.

Curva de contagios disparada ante la escasez de vacunas

Los problemas para Sídney no acaban ahí porque de los 25 millones de habitantes que tiene Australia, solo el 14 % tiene la pauta completa de vacunación y un 18% ha recibido al menos una dosis. "Estoy decepcionado con el gobierno, se han relajado en las vacunaciones", y a falta de vacunas, seguirán manteniendo sus fronteras cerradas al menos hasta el 2022, tal y como aseguró el Ejecutivo en el pasado.

En las últimas 24 horas solo se han registrado 177 nuevos casos en Nueva Gales del Sur, No parecen cifras muy preocupantes si las comparamos con las de España u otros países de Europa, y es que desde que comenzó la pandemia solo han contabilizado un total de 33.000 contagios, un número que España ha reportado varios días en tan solo 24 horas. Además, los fallecidos por el virus durante toda la pandemia no alcanzan el millar en un país que ha impuesto uno de los confinamientos más duros del mundo.

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