Brasil
Alerta máxima en Brasil por la posibilidad de atentado en la toma de posesión de Lula
Crece la tensión y los intentos en Brasil para impedir que el próximo 1 de enero Lula da Silva tome posesión como presidente del país.
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Alerta máxima en Brasil. En los últimos días la Policía ha detectado y desactivado artefactos explosivos a pocos días de la investidura de Lula da Silva como presidente del país. Aumenta el caos y los intentos para impedir que el 1 de enero Lula tome posesión. La Policía advierte de la posibilidad de un atentado por parte de los seguidores de Jair Bolsonaro.
Por ello, Brasilia desplegará toda su policía para la toma de posesión como presidente de Brasil el 1 de enero. Así lo aseguran unas autoridades preocupadas por la creciente tensión en el país. El domingo "habrá una movilización del 199% de las fuerzas policiales del Distrito Federal para garantizar la seguridad no solo del Presidente, sino también de las delegaciones extranjeras y del público", aseguraba el próximo ministro de Seguridad Flávio Dino.
Los planes de investidura no han sufrido ninguna modificación. Dino aseveró que será una ceremonia "segura" y en "paz". Animó a los brasileños viajar desde otros estados para acompañar los actos institucionales y shows previstos en Brasilia. Hace unos días, un hombre fue detenido en el aeropuerto de Río de Janeiro porque intentó detonar otro artefacto.
El hombre confesó que su objetivo era provocar el caos e impedir la toma de posesión de Lula. El rey Felipe VI asistirá a la toma de posesión y dará la bienvenida al año nuevo allí en Brasil. En la victoria de Lula ante Bolsonaro, los simpatizantes del ultraderechista bloquearon las rutas y se manifestaron para pedir que las Fuerzas Armadas impidiesen la toma de posesión.
Un despliegue policial del 100%
Flávio Dino ya ha avisado que "pequeños grupos terroristas y extremistas no pondrán contra la pared a las instituciones de la democracia brasileña. El domingo asistirán a Brasilia al menos 17 jefes de Estado o de Gobierno y los presidentes de Alemania, Portugal, Argentina y Uruguay. Se espera que 300.000 personas acudan a los actos en la capital en una celebración en la que ofrecerán varios conciertos.
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