Podemos rompe con Sumar y sus 5 diputados pasan al Grupo Mixto

Era una ruptura casi anunciada. Tras meses de distanciamiento, se confirma la fractura total entre Podemos y Sumar. Los 5 diputados de Podemos que salieron elegidos tras las elecciones del 23 de julio como parte de las listas de Sumar han decidido romper con el partido de Yolanda Díaz y pasar al Grupo Mixto. Entre estos cinco diputados de Podemos están la secretaria general del partido y exministra, Ione Belarra, la responsable de Organización, Lilith Vertsrynge, y el coportavoz del partido, Javier Sánchez Serna.

"Sumar ha intentado impedir por todos los medios que los diputados de Podemos hagan política. Nos dejó sin portavoces, eliminó nuestra capacidad de presentar iniciativas y ha impedido que hablemos en el pleno", explicó Javier Sánchez Serna en los pasillos del Congreso de los Diputados.

La secretaria general de Podemos, Ione Belarra, ha reaccionado en Twitter a esta decisión que califica de "difícil pero imprescindible para seguir transformando nuestro país". "Hace falta una izquierda feminista, ecologista y transformadora. Sí se puede", añade.

Desde Sumar aseguran que Podemos no les había informado previamente de esta decisión de salir del grupo parlamentario, pero desde la formación morada les contradicen y señalan que sí lo comunicaron con antelación. La portavoz de Sumar, Marta Lois, lo ve como "una gran deslealtad" con los votantes y acusa a la formación de "victimismo". También incide en que se trata de una flagrante ruptura del acuerdo de coalición electoral" que era un pacto para el "conjunto de la legislatura".

Esto supone un momento crucial en la formación liderada en su día por Pablo Iglesias, que vivió su mejor momento tras las elecciones de 2016 cuando logró 71 diputados (teniendo en cuenta los escaños obtenidos por sus confluencias).

Ahora, los votos de Podemos pueden ser decisivos en las iniciativas que ponga en marcha el Gobierno. Esos 5 diputados son desde este momento autónomos, y Moncloa tendrá que acordar directamente con ellos si apoyan o no cada cosa que quieran aprobar.

Meses de distanciamiento

La crisis entre Podemos y Sumar se hizo palpable cuando, al conocerse la convocatoria de elecciones generales tras las elecciones autonómicas del 28 de mayo, se abrió el debate sobre si ambos partidos concurrirían juntos o no a las elecciones.

Tras varias semanas de mutismo por ambas partes, Ione Belarra confirmó que sí que formarían parte de Sumar, pero pedía que Irene Montero formara parte de las listas. Su petición no tuvo respuesta y desde la formación morada insistieron en que fue la propia Yolanda Díaz quien vetó que la hasta hace pocas semanas ministra de Igualdad formara parte de su candidatura.

Desde entonces, la distancia entre ambos partidos fue a más y se agudizó tras el discurso de despedida de Irene Montero, en el que acusó directamente a Pedro Sánchez de "echarlas".

El último choque ha sido a cuenta del debate sobre Palestina de este martes en el Pleno del Congreso. Ione Belarra pidió intervenir, pero la dirección de Sumar apostó por su portavoz de Exteriores, Agustín Santos. "El resultado de este veto (a Belarra) es que hoy ha faltado en el Congreso la voz que con más contundencia ha condenado el genocidio que está perpetrando Israel en la frontera de Gaza y la voz que con mayor confesión ha exigido al Presidente del Gobierno que pase de las palabras a los hechos", insistía Javier Sánchez Serna.

Se da la paradoja de que la líder de Sumar, Yolanda Díaz, fue elegida directamente por Pablo Iglesias, fundador de Podemos, para convertirse en su candidata y "en la próxima presidenta del Gobierno". Ahora, su partido está fuera de la coalición de Gobierno en la que Yolanda Díaz sigue siendo vicepresidenta.

Los cinco diputados de Podemos pasan directamente al Grupo Mixto, sin necesidad de que la Mesa del Congreso lo autorice. Sumar se queda en 26 diputados y Podemos tendrá ahora que repartirse el tiempo de intervención como parte del Grupo Mixto con Coalición Canaria , BNG y UPN.

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