El líder del PP, Mariano Rajoy, cree que la política energética del Gobierno es en ocasiones "ridícula" y que las últimas medidas para reducir el consumo energético son "pura confusión", por lo que ha exigido "lealtad" al Ejecutivo y que aplique consenso con autonomías y ayuntamientos.
Tras una visita a Castelldefels (Barcelona), Rajoy se ha referido hoy a la polémica que ha desencadenado el plan de ahorro energético del Gobierno, que ha emplazado a las Comunidades Autónomas rebajar las tarifas del transporte público y que se ha encontrado con la negativa de la Generalitat catalana y de la Comunidad de Madrid.
Aunque no ha mencionado expresamente ninguna comunidad, Rajoy ha comentado: "No se pueden hacer leyes que luego tengan que pagar otros. Esto necesita orden, lealtad y reciprocidad".
Rajoy ha comentado que el Gobierno puede tomar decisiones, pero que las comunidades también tienen capacidad de decidir, y por ello ha instado al Ejecutivo a "reunir" a ayuntamientos y a comunidades para buscar "la colaboración y la cooperación de todos" en este asunto.
El presidente del PP ha reclamado al Gobierno una "política energética como Dios manda", fruto de un "plan" y no de un cúmulo de "improvisaciones".
Por otra parte, ha considerado "inadmisible" el aumento del paro en febrero y ha remarcado que su partido "no se va a resignar nunca" a que un 20% de los españoles que quieran trabajar no puedan hacerlo.