Menos de 6.000 entradas cada uno en un estadio con capacidad para 70.000 espectadores. Es la cifra que la UEFA ha concedido a Chelsea y Arsenal para que sus aficionados vean la final de la Europa League en directo.
En concreto, cada equipo podrá distribuir 5.801 entradas para sus hinchas, lo que dejará casi 58.000 entradas libres a repartir como la UEFA decida.