Museo del Prado

La pintura española de la Frick Collection llega al Museo del Prado

La colección de la Frick Collection se podrá ver en Madrid desde este mes de marzo hasta el próximo 2 de julio.

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Hacía más de un siglo que pinturas del Greco, Goya o Velázquez no pisaban España. La pintura española de la Frick Collection, una de las colecciones de arte más importantes de Estados Unidos, llega a Madrid.

Se trata de nueve obras de grandes maestros españoles, donde el "altísimo nivel de calidad y la variedad" de las piezas lo convierten en una "oportunidad única", según palabras de Javier Portus, jefe de Conservación de Pintura española del museo.

Todas ellas estarán expuestas hasta el 2 de julio en la sala 16A del museo, junto a una breve explicación sobre el coleccionista Henry Clay Frick. El museo ha emparejado las obras procedentes de Estados Unidos con otras del museo con las que mantienen afinidades, en una muestra que ha abierto hoy sus puertas en Madrid.

Las piezas son 'Vicenzo Anastagi', 'La expulsión de los mercaderes del templo' y 'San Jerónimo' del Greco, 'Felipe IV en Fraga' de Velázquez y un autorretrato de Murillo.

De Goya llegan tres retratos y otra pintura de gran calidad: los retratos son los del noveno duque de Osuna, el de un oficial, posiblemente el conde de Teba, y el de una mujer desconocida, hecho en sus últimos años. También llega 'La fragua', una pieza claro ejemplo de la cima de Goya en lo relativo a la expresión corporal.

'La expulsión de los mercaderes del templo' del Greco es un óleo de pequeñas dimensiones que el magnate estadounidense adquirió en España por unos 120.000 dólares.

El museo ha acompañado las piezas de la Frick con piezas de su propia colección como 'La Anunciación' y 'Retrato de un médico' del Greco, 'El primo' de Velázquez, que fue pintado a la vez que el 'Felipe IV' de la Frick y 'Juan Bautista Muguiro' en el caso de Goya.

Frick Collection

La Frick Collection está integrada por más de un centenar de obras de grandes maestros europeos como Rembrandt, Vermeer, Bellini, Ingres, Tiziano, Van Dyck, Turner, Monet, Degas o Renoir. Uno de los motivos que ha hecho posible la muestra es que la sede de la colección, en Nueva York, está siendo sometida a una renovación integral.

El Frick, que abrió sus puertas en 1935, se conserva como una mansión de principios del siglo pasado.

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