Decenas de personas acudieron a una de las procesiones más emotivas de Gran Canaria
Cada una de las imágenes ha recorrido en solitario las calles de Vegueta para irse encontrando tal y como se cuenta en los Santos Evangelios. San Juan y la Magdalena son los primeros en ver a Jesús. Pero el momento más esperado ocurre a los pies de la Catedral. La Virgen de Los Dolores ve a su hijo, que carga con la cruz.
Con la Madre y el Hijo juntos, ocurre el momento más emotivo, la Verónica sale al encuentro de ambos, para enjugar el rostro de Cristo. Su paño queda impregnado con el Santo Rostro.
Con este fervor lo vive la ciudad, que reconoce en el Santo Encuentro lo peculiar de una Estación de Penitencia diferente y emotiva y de unas imágenes de belleza sencilla y contenida.Tras su entrada en la Catedral, cada imagen sale de nuevo a la calle para volver a su templo, donde seguirán siendo veneradas hasta el próximo año.
