El buque Coriander, procedente de Asia, se dirige al Puerto de Las Palmas. El Centro de Inteligencia contra el Terrorismo sospecha de su tripulación, por lo que son interrogados.
El Capitán cae en incongruencias, por lo que la Armada decide entrar en acción. Varios efectivos toman el barco desde un helicóptero del SAR y un equipo de operaciones de seguridad marítima accede desde una lancha.
De inmediato se registra el buque hasta tenerlo bajo control.
Cuatro terroristas son localizados, además de armamento y material explosivo. Pretendían descargarlo todo en el Puerto, donde el mismo barco ya había dejado un contenedor con material radioactivo. Aquí toma el mando la Guardia Civil.
Este tipo de ejercicios se llevan a cabo anualmente para una mejor coordinación de todos los cuerpos de seguridad. Se ha desarrollado simultáneamente en 12 ciudades españolas.
