Manolita y Marcelino, desconcertados: La arriesgada decisión de Ciriaco para sobrevivir en la cárcel

Ciriaco vive un infierno cada día más terrible desde que entró en prisión. Si ya es duro estar entre rejas por un crimen que no ha cometido, su situación aún es peor desde que uno de los presos empezó a abusar de él.

Se trata de ‘El tuerto’, que ya le ha demostrado de lo que es capaz si el joven no cumple sus deseos. Él y un grupo de presos le dieron una brutal paliza.

Bajo esta amenaza, Ciriaco accedió a las peticiones de ‘El tuerto’. Sin embargo, no fue suficiente. “Has llegado tarde, tendrás que pagar los intereses”, le advirtió. El preso le ha pedido mil pesetas y dos cartones de tabaco.

Además, Ciriaco sigue rechazando la oferta de ayuda que le hizo otro preso. No quiere deberle nada, convencido aún de que puede sobrevivir por sí mismo.

Por eso, cuando Ciriaco al fin hace una llamada a sus padres, pide que le pasen el teléfono a Cristina. Marcelino y Manolita, que apenas han podido hablar con él, se quedan desconcertados. Además, el joven ha sido muy escueto en sus palabras.

Ciriaco ha tomado una arriesgada decisión para poder seguir sobreviviendo en la cárcel. Por eso, necesita que sea Cristina, y no sus padres, quien le visite. “Es urgente”, advierte el joven a la abogada.

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