Malena se apoya en Curro: “A Ester le hubiese gustado que fuéramos amigos”

Malena todavía está intentando hacerse a la idea de que Ester ya no está. Su trágica muerte ha marcado a todo el barrio, pero en especial a la pequeña de los Quevedo, que no tenía más amigos en Madrid y empezaba a estar bien gracias a ella.

Sin embargo, un encuentro con Curro lo cambia todo. El joven, que también conocía a Ester de la facultad, está pasando por lo mismo que ella. “Apenas coincidimos un par de veces y ya sentía una conexión especial”, le confiesa a Malena, que siente exactamente lo mismo.

“Mi número, llámame cuando quieras”, dice Curro, apuntándole su teléfono en la mano. Ambos han sentido una ilusión bonita al verse y quieren seguir conociéndose. “Hemos perdido a la misma persona, eso siempre une”, le advierte a Malena. ¿Tendrá la joven un nuevo amigo en Madrid?