Crimen de Lardero

Vídeo | Tragedia en Lardero: así atemorizaba el 'viejo del banco' a lo niños en el parque

La periodista Paula Rioz nos cuenta todas las claves de este polémico caso y hace un breve repaso del juicio que se celebra durante esta semana.

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El 28 de octubre de 2021 se convertía en la noche más trágica de la historia. Al menos, en Lardero, una localidad a tan solo 5 kilómetros de Logroño que quedó conmocionada con la desaparición del pequeño Álex.

Esa tarde jugaba disfrazado, cerca de un parque infantil, con familiares y amigos, pero su rastro se esfumaba por completo en tan solo minutos. Nadie se había percatado en ese momento de que, a tan solo metros, su presunto asesino lo acechaba desde un banco.

Rápidamente comenzaba una angustiosa búsqueda por la localidad que se saldaba con el hallazgo de su cuerpo. Fueron los propios vecinos y los agentes de la Policía Municipal los que sorprendieron al acusado en el rellano de su bloque con el cadáver del menor en brazos.

Ahora, 17 meses después, se celebra el juicio contra el principal acusado, Francisco Javier Almeida, para que el que la Fiscalía pide prisión permanente revisable por el delito de asesinato y 15 años de prisión por un delito de agresión sexual.

Paula Rioz, periodista de Antena 3 Noticias, nos cuenta todos los detalles del juicio y hace un repaso sobre la investigación en el vídeo superior de esta noticia.

En el momento de los hechos se encontraba en libertad condicional tras cumplir condena por otra agresión sexual a una niña y un asesinato a una joven.

Ya había temor en Lardero

En el barrio se comentaba su presencia. Merodeaba los lugares que frecuentaban los menores, como el parque o el colegio de la localidad, algo que no gustaba nada a los padres, que no sabían "a ciencia cierta" quién era. Sus hijos, sin embargo, sí. Lo llamaban 'el viejo del banco' y en alguna ocasión llegaron a fotografiarlo espiándolos desde la ventana de su vivienda.

Sin embargo, no solo llegó ahí. Con anterioridad, Francisco Javier Almeida ya había intentado raptar a una menor en Lardero. Así lo ha testificado la madre de la niña en el juicio que se está celebrando esta semana, donde ha dado a conocer que no pudo interponer una denuncia porque los agentes le aseguraron que no había pasado nada.

"Una niña le contó a su madre que este señor se la había intentado llevar a casa con el pretexto de cuidar unos pajaritos. La mujer se asustó, fue a la comisaría e intentó poner una denuncia en la policía municipal, pero los agentes le dijeron que no podía hacerlo porque no había pasado nada", explica la periodista a nuestro colaborador infiltrado. "Han pasado ya 17 meses y las madres todavía se rompen cuando lo recuerdan".

El acusado era reincidente

El historial delictivo del presunto asesino es estremecedor. En el momento de los hechos, en 2021, se encontraba en libertad condicional tras cumplir parte de su condena por otra violación a una menor de edad y un conocido asesinato a una joven trabajadora: el crimen de la inmobiliaria. Acudía a una agencia para alquilar una vivienda y, tras concretar una cita con una agente, la apuñalaba en reiteradas ocasiones hasta provocarle la muerte.

En 2020 salía de prisión a pesar de un informe desfavorable y se trasladaba hasta Lardero para establecer su residencia allí. En esa misma localidad acabaría con la vida del pequeño Álex, tal y como ha reconocido en el juicio, donde ha insistido que se encontraba bajo los efectos del alcohol y se ha mantenido "frío e imperturbable".

Tal y como explica Paula Rioz, Francisco Javier Almeida ha reconocido varias cosas: "Que subió con el menor a su apartamento, que lo obligó a desvestirse y que lo agredió sexualmente, aunque asegura que no utilizó la violencia. Sin embargo, sobre el asesinato, no concreta absolutamente nada. Lo que dice es que él lo vivió en una nube y que cuando fue descubierto con el cuerpo del niño en brazos quería ayudarlo y llevarlo al hospital".

Los investigadores desmontan su versión

A pesar de su testimonio, los investigadores son claros: no presentaba síntomas de embriaguez y la muerte del menor fue violenta, pese a su negativa.

El teniente de la Guardia Civil que lideró la investigación asegura que todas las pruebas apuntan a una muerte violenta, fruto de una asfixia. Además, subraya, queda probada la agresión sexual y las nulas posibilidades que Álex tuvo para defenderse.

"Este último argumento lo ratifican las médicas forenses", explica la periodista en la entrevista. "Dicen que las lesiones que el pequeño presentaba en la mandíbula y en el cuello indican violencia extrema".

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