Las lluvias tardías rematan un cereal ya agonizante por la sequía

Durante esta jornada en La Rioja ha permanecido activo un aviso amarillo por fuertes precipitaciones. Han caído hasta 20 litros por metro cuadrado en tan solo una hora. Una lluvia que llega en el peor momento posible. Cuando está a punto de comenzar la cosecha del cereal.

Álvaro Cantera, agricultor de Anguciana, explica que el agua ahora provoca en el trigo hongos. "El grano pierde calidad, se merma y coge unos colores que luego para el mercado no es válido", explica. De hecho, paseando por su parcela es sencillo detectar que el intenso color amarillo propio de esta planta en su época de recolección brilla por su ausencia.

Su preocupación es máxima. "Yo llevo 35 años de profesión y jamás en la vida había visto una situación de sequía tan extrema como esta", asegura.

El cereal apenas ha crecido un tercio de lo habitual. Álvaro nos señala que el trigo debería llegarle hasta la zona alta del muslo. Debería tener unos setenta centímetros y casi ni alcanza los veinte.

A todo ello hay que sumar los daños ocasionados por los animales. "Hemos tenido también ataques de conejos, corzos, jabalíes...Como tienen menos alimentos cada vez hacen más daño", asegura Álvaro.

Los agricultores calculan que se puede llegar a perder entre el 85% y 95% de la cosecha. Y todo ello en un Año en que los costos de producción han sido muy altos. La situación es tan mala que muchos se plantean no recolectar el cereal. "Meter la máquina aquí para recoger esto nos va a salir más caro que lo que vamos a obtener", subraya Álvaro.

Además la abundante cosecha de cereal a nivel internacional baja los precios de venta asfixiando aún más a nuestros agricultores.

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