Galicia

Un incendio calcina un templo budista en Ourense

Las llamas destruyeron un 70% de la estructura en la que residen los monjes desde hace más diez años.

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Se desconocen las causas pero sí hemos comprobado, a través de las imágenes que nos han llegado, la virulencia con la que se extendieron las llamas. Estamos en la aldea de Ventoselo, en la localidad ourensana de San Amaro. Aquí se sitúa un monasterio budista, el Chu Sup Tsang, que se inauguró en agosto de 2014.

Este martes, sobre las 15:45, la Guardia Civil recibió una llamada alertando de lo que estaba sucediendo. Rápidamente la Agencia Galega de Emergencias movilizó a Protección Civil y al parque de Bomberos de O Carballiño para intentar controlar el fuego.

Todos los monjes estaban ya a salvo, cuando los servicios de emergencias llegaron, pero el 70% de la estructura del templo se destruyó. Las primeras llamas se originaron en el dormitorio de la primera planta, cerca del lugar por donde pasa el tubo de la chimenea y, aunque varios miembros de la comunidad intentaron sofocarlas, el fuego se expandió con rapidez debido a la gran cantidad de madera con la que cuenta la estructura.

Los monjes llevan una década residiendo en esta pequeña aldea y la vida con los vecinos es perfecta. De hecho, se suelen organizar jornadas rituales especiales para que los curiosos puedan acudir a verlas.

También las cámara de la delegación de Antena 3 Noticias en Galicia estuvieron en este templo. Concretamente lo visitaron el 12 de enero de 2020 cuando cumplieron diez años en el lugar. Por aquel entonces, Gueshe Tenzing, monje budista y creador del primer templo de este tipo en toda España, comentaba con orgullo cómo había ido creciendo la comunidad. Pasaron de contar con 40 alumnos a tener "ciento treinta y pico", aseguró entonces.

Su idea era la de asentar y consolidar el Budismo en nuestro país y, parece, que lo está consiguiendo. Tras este infortunio, toca seguir trabajando para recuperar el monasterio y seguir impartiendo su cultura, filosofía, creencias y prácticas espirituales.

Por su parte, los bomberos de O Carballiño han mostrado su malestar tras el incendio. Se quejan de la inseguridad con la que trabajan y aseguran que el vehículo desplazado carece del mantenimiento adecuado. Además, sostienen, los cascos y los trajes están caducados o rotos.

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