Hallan el origen del brote de gastroenteritis en Tarazona lejos de donde esperaban encontrarlo

Desde la Salud Pública de Aragón se ha determinado que, después de haber realizado unos análisis exhaustivos al agua de su territorio, se han encontrado que en diferentes zonas del cauce del Río Queiles hay rastros del brote de gastroenteritis que se ha detectado en Tarragona y en otros pueblos del entorno. Éstos análisis, han asegurado que el origen se encuentra en este río deCastilla y León y no en Aragón como se pensó en un principio.

¿Cómo llegó de Castilla y León a Tarragona?

El Río Queiles está muy segmentado y eso podría ser una de las principales causas por las que la gastroenteritis alcanzó Tarragona ya que los análisis que realizó la Salud Pública aseguró la presencia del protozoos Cryptosporidium. Ahora mismo se está trabajando para que Tarragona y todas las unidades afectadas puedan volver a la normalidad cuanto antes.

El servicio de protección de la naturaleza de la Guardia Civil, financiados a través del departamento de sanidad del gobierno de Aragón, fueron los encargados de ordenar que se hiciera un análisis de las aguas del Río Queiles, donde finalmente han detectado la presencia de la gastroenteritis antes de que el río entrase en el territorio de la comunidad de Aragón, por lo que el origen está en Castilla y León.

Estas son las comunidades afectadas

Todas las actuaciones va a estar Coordinadas a partir de este lunes por la dirección General de salud pública del ministerio de sanidad junto con el ministerio del interior y las comunidades de Castilla y León, Aragón y Navarra debido a que esta última también adquiere agua del Río Queiles para poder llegar el embalse de la Dehesa que abastece algunas localidades de la Comunidad Foral de Navarra.

Los afectados presentan signos leves

El protozoos Cryptosporidium es el principal causante de este brote de gastroenteritis que hace un par de semanas se declaró en Tarragona. Suele darse en medios acuáticos informando de ooquiste y no tiene otra forma de detección que no sea la de un control rutinario en las aguas. El brote ya ha contabilizado más de 498 casos y los pacientes presentan un cuadro de enfermedad relativamente leve con signos de diarrea, y algunos vómitos o fiebre en casos puntuales.

Para evitar la propagación de la enfermedad, los habitantes de Tarragona no van a poder usar el agua para beber ni para lavarse los dientes. Del mismo modo, van a tener que hervirla durante unos 10 minutos para poder cocinar con ella. Esta restricción va a estar vigente desde el jueves 21 de septiembre en algunas localidades.

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