La carta de agradecimiento de un niño con movilidad reducida dedicada al cuerpo de bomberos de Palma de Mallorca ha emocionado a las redes sociales. "Quiero ser bombero para ayudar a las personas como lo han hecho conmigo en esta ocasión", asegura el menor en su escrito.
Ángel es un niño de siete años que padece una enfermedad rara llamada AME (Atrofia muscular espinal). Según él mismo explica, su "enfermedad está asociada a un gen diferente al típico AME común", para el que "no existe ningún tratamiento, ni investigación, ni ensayos clínicos".
El ascensor del edificio en el que vive ha estado en reparación durante dos semanas por lo que ha necesitado ayuda de profesionales. "Subir hasta un quinto me resulta imposible por el cansancio que me ocasiona y por la imposibilidad de doblar las rodillas con los aparatos", cuenta Ángel en la publicación de Facebook.
Su familia ha estado intentando "con todas sus fuerzas hacerlo, pero a mitad de camino sus fuerzas se agotaban". "Entre la silla de ruedas, la mochila del colegio, las de las actividades... ya de por sí es complicado, imaginaros sin ascensor", escribe.
Fue entonces cuando decidieron llamar a los bomberos de Palma. "Les estoy tremendamente agradecido porque han estado viniendo mañana, tarde y noche para que pueda ir al colegio, a mis fisios y a todas mis actividades con normalidad", les agradece.
"Han sido muy agradables con nosotros y desde entonces no dejo de pensar en ellos y en el trabajo tan bonito que hacen. Gracias bomberos de Palma por vuestra generosa ayuda. No sé lo que hubiéramos hecho sin vosotros", concluye su agradecimiento.
