El documento de la polémica es una transcripción de un chat de los profesores del colegio público en el que insultan gravemente a alumnos y familias. La pasada semana alguien de forma anónima lo repartió por los buzones de todo el pueblo.
El alcalde de la localidad madrileña, Juan José Huélamo, ha denunciado el caso a la Guardia Civil y convocó ayer una reunión con los vecinos a la que ha asistido el responsable de la Dirección de Área Territorial (DAT) de Madrid Sur de la Consejería de Educación. Calificó los mensajes de duros y escandalosos.
Según ha explicado el alcalde, "en la madrugada del Viernes Santo se buzoneó en algunas calles un escrito anónimo con una selección de comentarios hechos entre febrero y noviembre de 2014 por una decena de profesores", de los veinte que forman el grupo, creado en su día por la directora del centro. En las conversaciones "hay nombradas personas concretas, madres, profesores, familias y niños con sus nombres, en un lenguaje absolutamente soez, muy duro, más allá de lo estrictamente coloquial, calificando a los niños y a los padres", añade Huélamo. "Podría suponer algún ilícito penal", ya que menciona al pueblo en general, al alcalde, a menores, docentes y familias, y además podría "alterar el normal funcionamiento del colegio", continúa.
A la reunión con los vecinos asistió el director de la DAT, Alberto González, quien informó a las familias que un antiguo docente del colegio interpuso una denuncia administrativa al respecto el pasado 2 de marzo, y que la DAT ya había iniciado el trámite "para saber cuál era la validez jurídica del contenido de un whatsapp", relata el alcalde.
Tras esta primera denuncia administrativa, la DAT obtuvo la totalidad de los contenidos wasapeados, unas "60 páginas por lo menos", para contextualizar los comentarios, ya que la selección de conversaciones buzoneadas anónimamente ocupa cinco folios. Estos comentarios despectivos, que en un principio "pertenecen al ámbito de lo privado", se han hecho públicos con el buzoneo, que pese a no llegar a todos los hogares, "corrió como la pólvora" por el pueblo.
En la reunión, en la que los vecinos expresaron "su enfado y su descontento", la DAT se comprometió a iniciar los trámites administrativos y en 15 días tomar las decisiones que correspondan. El colegio de Infantil y Primaria (CEIP) Tomé y Orgaz tiene 396 alumnos y unos 26 profesores, y tres cuartas partes de la plantilla son funcionarios.
También lo comunicó a la Consejería de Educación. Esta misma mañana dos inspectores visitaban el colegio. Hay varias denuncias previas puestas por algunas familias. Silvia denunció a una de las profesoras por humillaciones a los niños. “Los insultaba, los llamaba bocachanclas y delincuentes. Además les decía que no iban a llegar a nada, que las niñas iban a ser peluqueras y los niños barrenderos”.
María José se llevó a su hijo del colegio. El niño cayó en una depresión. Y acusa al colegio de no haberle prestado ninguna ayuda ni apoyo. La directora del centro no ha querido hacer declaraciones. Por su parte, la Conserjería espera poder aclarar unos hechos que califican de graves.
