Sucesos
Un bebé de 10 meses, ingresado tras ingerir cocaína en Málaga
La Policía está investigando el caso. La madre asegura que el pequeño había cogido algo del suelo de la casa de una vecina.
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Este miércoles se ha conocido que un bebé, de tan sólo diez meses, estuvo ingresado en un hospital de Málaga por un posible consumo de cocaína. La madre asegura que tiene que ver con algo que cogió en casa de una vecina, mientras que los agentes ya han comenzado con la investigación para arrojar luz sobre los hechos.
El ingreso del pequeño tuvo lugar el pasado 19 de agosto en el hospital Materno-Infantil de Málaga. Según parece, la madre lo llevó a urgencias con indicios de haber sido drogado, ya que estaba adormilado y con las pupilas dilatadas.
Detectaron presencia de cocaína en el bebé
Según la versión que la madre ofreció a los profesionales médicos, el bebé cogió algo del suelo de la casa de una vecina, que vendía ropa en el barrio, y se lo introdujo en la boca. Tras los pertinentes análisis de sangre y orina realizados al crío, los sanitarios detectaron presencia de cocaínaen su cuerpo, por lo que tuvo que ser ingresado.
El menor permaneció en el centro sanitario un total de tres días, recibiendo el alta el pasado lunes. Los médicos, que ya habían alertado al juzgado y a los servicios sociales, convencieron a la progenitora para que dejase ingresado al bebé esos tres días, aunque ella intentó sacarlo del hospital cuanto antes, asegurando que quería continuar la recuperación en su domicilio.
La Policía Nacional se encuentra, en estos momentos, investigando lo ocurrido para determinar qué es lo que ha pasado y cómo ha acabado el bebé de menos de un año ingiriendo cocaína.
Segundo bebé drogado en dos semanas
No es el primer caso en España en el que se detecta la presencia de drogas en un infante. De hecho, hace tan sólo dos semanas otro bebé, de 19 meses, dio positivo en cannabis y también en cocaína, en Las Palmas.
El suceso acabo con la detención de ambos padres, de 25 y 27 años, por un presunto delito de abandono de familia. Ambos reconocieron consumir estas drogas, y el pequeño fue puesto bajo la tutela de su abuela.
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