España cree que Moscú ordenó matar al desertor ruso al que dispararon y atropellaron en Alicante

Para los servicios de Inteligencia de nuestro país, no hay duda de que el Kremlin esta detrás de la muerte de Maxim Kuzminov, el piloto ruso que desertó a Ucrania y fue asesinado a tiros esta semana en un garaje la localidad alicantina de Villajoyosa. Según la Inteligencia española los agentes rusos que tirotearon al joven soldado habrían sido enviados por órdenes del Gobierno de Putin.

El Gobierno español se ha mostrado de momento cauto ante la posible autoría del gobierno ruso. "Hay que dejar que la Guardia Civil haga su trabajo y la investigación avance", afirma la portavoz del Gobierno, Pilar Alegría.

No obstante, fuentes diplomáticas de nuestro país aseveran, a la espera de que se recabe la suficiente información, que se trata de un asunto "gravísimo" y que si se confirma la implicación de las autoridades rusas, España dará una "repuesta contundente".

Sin embargo, ante este crimen Rusia no se esconde. Los medios rusos fueron los primeros en emitir la noticia de la muerte de Kuzminov, incluso antes de que se confirmara su identidad. Posteriormente, fue el jefe del Servicio de Inteligencia Exterior (SVR) ruso, Serguéi Narishkin, quién declaró que la víctima era "un traidor criminal" y "un cadáver moral" desde que desertó de su país.

Estas contundentes declaraciones del jefe del SVR han hecho que los expertos duden de si este crimen fue obra de dicho servicio secreto, del Servicio Federal de Seguridad (FSB) que es heredero de la KGB o del propio servicio militar de inteligencia (GRU), ya que Kuzmínov, al ser capitán del Ejército, operaba bajo su competencia.

Quién era Maxim Kuzminov, el desertor ruso asesinado en Alicante

Maxim Kuzminov, de 28 años, que ya había expresado previamente su aversión al conflicto bélico y su preferencia por labores pacíficas, decidió desertar a cambio de una nueva identidad y beneficios económicos prometidos por Kiev.

El pasado mes de agosto Kuzminov, dentro de una audaz operación promovida por los servicios secretos ucranianos, aterrizó con su helicóptero de combate 'Mi8' en la base militar de Jarkov (Ucrania). Los dos tenientes que iban con él fueron abatidos en suelo ucraniano tras intentar huir al no saber del plan de fuga del joven ruso.

Kuzminov se instaló en Villajoyosa (Alicante) a finales del pasado mes de diciembre, una decisión extraña en sus circunstancias dada la cantidad de población rusa afincada en esta zona, que podría sospechar de él. Empezó a trabajar como albañil, pero su nueva vida le duró pocos meses. Esta semana recibió seis disparos en un garaje desde un coche, que le atropelló y huyó a toda velocidad.

Otras muertes de disidentes orquestadas por Moscú

No sería la primera vez que enviados por el Kremlin matan a desertores rusos. El caso más conocido es el de Alexander Litvinenko, en 2006 en Reino Unido. Litvinenko fue envenenado con plutonio al beberse una taza de té en un hotel de Londres. Aunque fue considerado un crimen casi perfecto, finalmente el Tribunal Europeo de Derechos Humanos consideró a Rusia "responsable" del asesinato del exespía y opositor ruso.

Recientemente, el opositor Alexéi Navalny apareció fallecido en una cárcel rusa en circunstancias no aclaradas. Aunque la versión oficial de las autoridades rusas es que Navalny murió por "causas naturales", sus seguidores mantienen que fue asesinado sobre todo después de que las autoridades gubernamentales hayan tardado tanto en entregar el cuerpo a su familia.

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