Inflación

Experimento en un mercado canario: los precios no dejan de fluctuar

Así se puede ver en los mercados locales cómo la fluctuación de precios afecta a los consumidores.

Publicidad

Hacemos un recorrido por un mercado municipal de Canarias y apuntamos precios, como se puede ver en el vídeo de la parte superior. Tomates, pimientos, pepinos y ajos han subido más de un 11%. El aceite de oliva, más de un 22. El vinagre cuesta ya un 26% más que el año pasado. Y lo mismo pasa con el pan, que ha subido un 9,3%, con la sal (un 13,7%) y hasta con el agua.

Donde más notamos el vaivén de precios es en las frutas y verduras. Números que suben y bajan desde el principio de la inflacióny, ahora, con las pérdidas de algunas cosechas debido al mal tiempo, volvemos a encontrar algunos precios por las nubes.

En Canarias, por ejemplo, una de las frutas estrella por excelencia que ha sufrido este vaivén de precios es el plátano. Hace unos años llegamos a pagar más de tres euros por un kilo de plátanos y ahora los podemos encontrar hasta por 0,90. En el puesto que David tiene en el mercado municipal de Nuestra Señora de África, en Santa Cruz de Tenerife, encontramos a los clientes haciendo cola para comprar.

Aquí, David intenta ajustar los precios, porque sabe que vienen familias muy desfavorecidas con sueldos muy bajos y que tienen dificultades para hacer la compra. Por eso hoy ha puesto los plátanos a 90 céntimos. Dice que "son de primera, y están a muy bien precio", pero reconoce que los ha tenido algo más caros. Son muchos los productos que han sufrido variaciones desde que salen del campo hasta que llegan al mercado. En algunos casos, hemos visto hasta un 35 por ciento de variación en las etiquetas durante estos últimos meses.

Publicidad