La tromba de agua que cayó sobre las nueve de la mañana cortó la carretera que une la capital lanzaroteña con San Bartolomé, a la altura de la circunvalación de Arrecife. Con 53 litros por metro cuadrado, Lanzarote es la isla donde más ha llovido desde que se inició la borrasca, y también donde se han producido los chubascos más intensos en periodos muy cortos de tiempo.
Además de la lluvia, la fuerza del mar batiendo sobre el muelle de los mármoles ha dificultado las operaciones en el puerto capitalino durante toda la jornada. Los efectos de la borrasca se iniciaron de noche, anegando las calles de las principales localidades del este de la isla, desde Arrecife al núcleo turístico de Puerto del Carmen. Los vecinos de playa Honda y del pueblo de San Bartolomé también fueron testigos de la inundación de las calles y de las alcantarillas.
Aunque ha llovido menos que en su vecina Lanzarote, Fuerteventura también ha sufrido las consecuencias de la borrasca. Empezó de madrugada y sobre todo afectó a las comarcas del sur y este de la isla. Los vecinos de Gran Tarajal y los operarios del cabildo han tenido que trabajar duro para limpiar las calles. De día, las playas se tiñeron de marrón debido a las barranqueras. En el norte también llovió durante la mañana, afectando, principalmente, a la localidad turística de Corralejo. Por ahora han caído cerca de 30 litros por metro cuadrado.
