Ömer se imagina una vida de ensueño con sus hermanas… ¿Llegará algún día?

Ömer se vio obligado a aceptar el trabajo que le habían ofrecido los mafiosos que le prestaran dinero a su tío en su momento para sacar adelante a su familia. Aunque a ojos de todos, su nuevo empleo era como repartidor de supermercado.

Desde que ha comenzado a trabajar para esa peligrosa gente, su hermana Asiye ha notado comportamientos extraños en él y saber que le habían confiado 100.000 liras fue la gota que colmó el vaso.

Ömer intenta convencer a su hermana de que su trabajo no es peligroso y de que todo va bien. “Me las apañaré de seguir en este trabajo hasta que nuestros sueños se cumplan”, asegura el joven Eren.

Mientras mantienen esta conversación, Ömer se imagina a sus hermana y él viviendo en una casa de ensueño, en la que cada uno tendría su propia habitación y en la que nunca faltarían suculentos manjares.

Ömer está convencido de que algún día tendrán su propia casa y un restaurante, por eso trabajará muy duro para ello ¿Lo conseguirán? ¿Descubrirán sus hermanas a qué se dedica realmente?