Sufre quemaduras de tercer grado tras sentarse en un asiento de autobús con ácido en Madrid

Maria Luisa, una mujer de 60 años de Guadalajara, tuvo que ser atendida por quemaduras de tercer grado provocadas por ácido arrojado sobre el asiento del autobús público en el que se subió en Ambite, Madrid.

La mujer notó un fuerte quemazón sobre sus glúteos y descubrió una "cosa viscosa" que le producía el grave ardor. Sin embargo, mantiene que no fue capaz de diferenciar nada en el asiento y que tampoco se "desprendía ningún olor". Asimismo, su acompañante, quien le ayudó a limpiarse, sostiene que el asiento de Maria Luisa "estaba mojado".

La mujer tuvo que ser trasladada al Hospital de Arganda del Rey, pues el ácido había traspasado el pantalón y llegado a la piel dejando algunas zonas necrosadas.

Maria Luisa, denuncia la falta de respuestas y atención por parte de la compañía de autobuses, la cual apunta que "no había nada en el asiento" y que la empresa de mantenimiento también revisó el autocar, pero "tampoco encontraron restos de ningún producto".

El servicio de viajeros será quien se hará cargo del caso, pero la mujer afectada explica que cuando trata de ponerse en contacto, recibe respuestas como "ya le llamarán" o "vuelva usted mañana que las oficinas están cerradas".