Tres detenidos en la 'clínica del terror de Marbella' tras la denuncia de 10 pacientes con secuelas físicas

La Policía Nacional detenido a tres personas de una clínica estética de Marbellaque, supuestamente, realizaban tratamientos de forma "irresponsable, careciendo además de la cualificación específica y usando medios irregulares". Por ahora, hay al menos una decena de personas afectadas y a algunas les han quedado lesiones graves.

Con la información recabada, y las gestiones practicadas con organismos oficiales sanitarios, se pudo comprobar que la clínica no contaba con personal cualificado ni autorizado para la práctica de estos tratamientos. Además, los aparatos utilizados supuestamente "tampoco eran los adecuados ni el personal que los utilizaba contaba con licencia ni formación para su utilización".

La clínica estética de Marbella, acusada de mala praxis

Una de las afectadas, María, que no ha querido revelar su identidad real, ha explicado su caso en directo para Espejo Público, delante de la clínica en cuestión, ubicada en Puerto Banús y que lleva cerrada desde el pasado 1 de febrero de este mismo año.

María recibió un tratamiento anticelulítico y, a los pocos días, sufrió importantes daños en sus piernas. Además, le pusieron anestesia sin su consentimiento. "Me dijeron que me iban a poner un pinchacito para que me relajase y ya no me acuerdo de nada más", afirma la afectada.

La dueña de la clínica despertó a María tres horas después del tratamiento y de una manera "muy brusca" y la llevó a recepción para hacerle una foto para su cuenta de Instagram. "Puso su póster y me dijo cómo me tenía que poner, pero yo le dije que no", recuerda, mientras que la dueña le aseguraba que no eran para ella, sino para la propia María. Sin embargo, las acabó publicando.

Lesiones en la piel tras los tratamientos

Después de eso, la víctima regresó a casa, donde se puso una faja y se aplicó los productos post tratamiento para recuperar la piel. "Según van pasando las horas, vas viendo cómo tienes quemaduras en la piel y va saliendo la sangre", afirma, explicando que, ahora mismo, tiene "una cuadrícula de sangre" en toda la piel.

Finalmente, la sangre se fue y estuvo "más de tres meses con la faja y sin poder tomar el sol", cuando desde la clínicale indicaron que era cuestión de tres semanas. "Todavía sigo teniendo marcas, como si tuviera un tatuaje que todavía no se te ha ido", asevera.

Otra de las víctimas de la 'clínica del terror' es Fabiola, que acudió al centro para hacerse un tratamiento facial con una amiga y denuncia, al igual que María, el uso de la anestesia general sin consentimiento. Cuando se despertó, tenía la cara "quemada y llena de sangre" y no podía abrir apenas los ojos. Además, tenía un "dolor insoportable".

Además, asegura que los supuestos profesionales de la clínica no informan acerca del tratamiento que van a realizar. "Solo te dicen que es un tratamiento que, después de tres o cuatro días, puedes salir y ponerte maquillaje, pero no es así", recalca.

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