Drogas
Una infidelidad, cuatro detenidos y una red de narcotráfico en Puente de Vallecas
El hombre infiel llegó y se encontró con dos operarios de limpieza en casa de su pareja.
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Las infidelidades de 2023 están dejando atónitos a todo el mundo, aunque -por el momento- ninguna había salido tan 'cara' para llegar a meter en el calabozo a uno de los miembros de la pareja. Hasta ahora. Delincuencia, drogas y una infidelidad -después de cinco años de relación-, todo esto ha sucedido en el madrileño barrio de Vallecas.
El pasado 8 de marzo, en la calle Buendía número 25. En uno de los bajos se inició un altercado sobre las 18:50 horas entre varios hombres. La sala 092 envió un coche patrulla al lugar de los hechos y se encontró un suceso propio de una telenovela. Un hombre, presuntamente, habría engañado a su pareja y esta 'pasó página' de una forma peculiar, lo que habría desencadenado la 'bronca'.
La policía llegó y accedió a la vivienda, encontrándose a un hombre de 32 años con un estado de nerviosismo muy potente. Este dijo que "llevaba dos o tres días fuera de casa" y que al llegar se encontró a varones que "le atacaron" para "echarle". "Tú ya no vives aquí, tienes que marcharte. Por las buenas o por las malas", dijo que le habían ordenado.
Firmaron un 'contrato'
Los policías tomaron declaración a los hombres que habían 'entrado en el domicilio'; un español y un extranjero de 22 y 54 años, respectivamente. Dijeron estaban en la casa porque el día antes habían sido "contratados verbalmente" por una mujer, que les mostró un contrato de alquiler, para que limpiaran el piso. Asimismo, acusaron al supuesto inquilino de haberles intentado agredir con un bolomachete de 46 centímetros de largo que se había guardado en el pantalón. Este arma blanca fue incautada, era un machete espartano, de la marca Albainox, de color gris. El representante de la inmobiliaria llegó -de casualidad- e indicó que no había ningún contrato con los nuevos inquilinos-operarios de limpieza que estaban allí.
Infidelidad al descubierto
Los agentes preguntaron al hombre -que decía que era su vivienda- cómo era la casa por dentro, para ver si tenía razón o era falso que vivía allí. Los datos que contó, además de las fotos que había en el piso en las que aparecía con su pareja, justificaron que todo lo que decía era verdad. Al momento, llegó otro hombre, que dijo que era amigo del hombre y que sabía que allí es donde tenía "intimidad y actividad de carácter privado" con su -hasta el momento- pareja. Además, los policías municipales le cachearon y encontraron que llevaba en el bolsillo una bolsita con "sustancia blanca"; que reconoció que era cocaína. La droga fue decomisada y levantaron un acta contra él por tenencia de sustancia estupefacientes.
El hombre fue infiel
Una vez que se finalizó este trámite, los funcionarios llamaron a la mujer y esta 'descubrió' todo lo que había pasado. Ella había sido pareja del hombre durante cinco años, le había echado de casa porque se había enterado que le fue infiel, el hombre pasaba bastante tiempo en esta vivienda aunque no era su domicilio habitual. El propietario de la vivienda aseguró que el hombre llevaba varios días sin dormir en la casa y por ello, mando a dos personas para que limpiasen.
Narcopiso y drogas
La policía detuvo al infiel, a los dos 'limpiadores' con nuevo contrato y al propietario de la casa. El piso resultó ser un narcopiso y además, en el calabozo uno de los arrestados trató de esconder 51.7 gramos de cocaína.
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