La Comunidad de Madrid reconoce su 'preocupación' por el repunte de violencia

Verano negro en la Comunidad de Madrid, marcado por crímenes como el apuñalamiento de este fin de semana a un hombre en Usera. O uno de los últimos, que ha dejado a un hombre de 46 años herido grave tras recibir un disparo en la cabeza en el interior de un restaurante de Usera.

Estos meses también han estado marcados por varios casos de violencia de género. Como el asesinato de un hombre a su expareja de 34 años, a la que apuñaló en el Distrito de San Blas-Canillejas.

La vicealcaldesa y concejala delegada de Seguridad y Emergencias de Madrid, Inmaculada Sanz, ha admitido que el Ayuntamiento está "preocupado" por el repunte de delitos este verano. Por este motivo, ha pedido al Gobierno central que les dejen contratar a más agentes municipales.

"Llevamos mucho tiempo diciendo que Madrid necesita más policías, necesitamos más policía municipal, hay un déficit estructural de más de mil agentes en nuestra plantilla. Lo venimos denunciando desde hace cuatro años que entramos en el Gobierno. Lamentablemente, no hemos tenido ningún tipo de respuesta positiva por parte del Gobierno de España para que podamos incorporar ese número de policías que esta ciudad necesita", ha declarado Sanz.

La vicealcaldesa también ha demandado más agentes nacionales. "Al final hablamos de temas de seguridad ciudadana. Es la Delegación de Gobierno quien tiene esas competencias asignadas", ha asegurado.

Sin embargo, Sanz ha querido tranquilizar a los ciudadanos. "Estamos en una de las capitales mundiales más seguras del mundo y así lo reflejan todos los datos y rankings", ha asegurado. "Pero efectivamente está habiendo problemas de repuntes de esos hechos delictivos que tienen que ver con armas blancas y, por tanto, es algo a lo que hay que atender", ha añadido.

Finalmente, respecto a los últimos sucesos de Usera y San Bernardo, la concejala delegada de Seguridad y Emergencias de Madrid ha pedido dejar trabajar a los agentes. "Los sucesos que se han producido en las últimas semanas en algunos casos tiene que ver con bandas juveniles y en otros casos han tenido que ver con cuestiones relativas a violencia de género, a reyertas familiares y en otros casos ni siquiera está claro. Son investigaciones todas ellas que están en curso y, por tanto, yo creo que debemos dejar trabajar a los policías", ha concluido.

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