Claves para diferenciar el coronavirus, la gripe y el resfriado común

Publicidad

Coronavirus

Claves para diferenciar el coronavirus, la gripe y el resfriado común

La fiebre, la tos seca, la fatiga o el dolor de garganta, de cabeza y muscular son los síntomas que con más probabilidad se darán en el coronavirus y la gripe.

Este año la preocupación sobre la gripe estacional ha aumentado con la aparición del coronavirus, por eso es muy importante saber cuáles son los síntomas que los diferencian. Tanto la gripe como el coronavirus son enfermedades virales que afectan al sistema respiratorio y que se transmiten del mismo modo: con el contacto directo e indirecto en superficies, y a través de gotículas y pequeñas partículas expulsadas al estornudar, toser o hablar.

Por ello, ahora mismo, las dos enfermedades podrían prevenirse en gran medida respetando rigurosamente las medidas de salud pública estipuladas por las autoridades sanitarias: continua higienización de las manos, distanciamiento social y uso adecuado y obligatorio de la mascarilla.

A parte de la sintomatología, también resulta fundamental tener en cuenta, en primer lugar, que algunas personas presentan síntomas muy leves o prácticamente inexistentes del coronavirus y, en segundo lugar, que, aunque es muy poco habitual, es posible contraer ambas enfermedades a la vez, con todo el impacto que esto puede tener para la salud.

Claves para diferenciar el coronavirus, la gripe y el resfriado común
Claves para diferenciar el coronavirus, la gripe y el resfriado común | Antena3Noticias.com

La fiebre, la tos seca, la fatiga o el dolor de garganta, de cabeza y muscular son los síntomas que con más probabilidad se darán en ambas dolencias. Sin embargo, existen algunas señales que pueden ser reveladoras a la hora de diferenciar entre un posible contagio por gripe o por coronavirus. El departamento médico de Cigna las explica:

  • Pérdida de gusto y olfato. La anosmia es uno de los síntomas más reportados por los pacientes de COVID-19. Aunque, a veces, puede darse en el transcurso de una gripe, o incluso en un resfriado, la pérdida de olfato relacionada con una infección por coronavirus es distinta. Según una investigación4 publicada en la revista Rhinology, los pacientes de COVID-19 que pierden la capacidad olfativa no sufren sensación de nariz tapada ni goteo líquido. Además, en muchas ocasiones, la anosmia va acompañada de la pérdida del sentido del gusto (ageusia).
  • Falta de aire. La disnea o falta de aire es uno de los indicios que puede activar la señal de alarma respecto al COVID-19 y, según la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN)5, se corresponde con uno de los últimos síntomas en desaparecer tras superar la fase aguda de la enfermedad.
  • Orden de manifestación de los síntomas. Según un estudio6 realizado por un grupo de investigadores de la University of Southern California, la progresión más probable de los síntomas del COVID-19 es fiebre, luego tos, posteriormente dolor de garganta y cabeza y mialgia, seguido de náuseas o vómitos y, finalmente, diarrea. En el caso de la gripe, la tos sería el primer síntoma, seguido de fiebre, dolores musculares, náuseas o vómitos y, para terminar, diarrea.
  • Velocidad de inicio: el comienzo de la gripe suele ser más intenso e inesperado (de uno a cuatro días después de haber contraído la infección), con malestar y fiebre alta repentinos. En cambio, en el coronavirus, los síntomas van apareciendo de forma progresiva a lo largo de varios días. Tal y como se ha podido comprobar hasta ahora, el COVID-19 presenta su sintomatología en torno al quinto día después del contacto con una persona contagiada, aunque este periodo de tiempo puede variar desde 2 días después de haber contraído el virus hasta 14.
  • Erupciones cutáneas o cambios de color en los dedos de las manos o los pies. A medida han ido pasando los meses, comenzó a detectarse en pacientes con coronavirus diversos problemas en la piel, lo que lo sitúa como un síntoma inequívoco que también permitiría distinguirlo de la gripe. Un estudio en el que ha participado la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV7) lo confirma.

Si, por el contrario, lo que se está experimentando es tos, congestión nasal, estornudos, irritación en los ojos, picor en la nariz y, en el caso de los niños, fiebre, lo más probable es que se esté sufriendo un simple resfriado.