Borrasca Aline
Caos absoluto en las estaciones de Madrid y Barcelona con parones de varias horas por las fuertes lluvias
Las estaciones han permanecido abiertas durante la noche debido al temporal ocasionado por la borrasca Aline. Los trenes han recuperado la normalidad este viernes.
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Caos absoluto en las estaciones de Madrid y Barcelona. Los AVE se han retrasado varias horas. "Me dijeron 20 minutos, luego dos horas y luego tres", dice un pasajero afectado. "Aquí había un jaleo monumental", afirma otro.
Los que llegaban con demora lo primero que hacían era preguntar dónde reclamar. Es el caso de una señora, que se acerca a un trabajador y le pregunta dónde se puede ir a reclamar.
El último tren en llegar a Madrid desde Barcelona lo hizo a las 10:30 horas de la noche y con retraso. Una señora explica a Antena 3 Noticias que tardó 5 horas más de lo previsto.
Son varios los pasajeros que han perdido conexiones con otros trenes. Una joven nos relata que "nadie le dice nada, que nadie la informa".
A los pasajeros les llegaba la información por mensajes al móvil. A última hora muchos trenes eran suspendidos. Según los responsables la climatología, la lluvia y el viento han dificultado las labores de reparación de las estaciones.
Estaciones abiertas durante la noche
Adif ha informado de que las estaciones de Santa Justa, en Sevilla, Córdoba, Sants en Barcelona y Atocha en Madrid han permanecido abiertas durante la noche para los viajeros que tuvieran dificultad a la hora de desplazarse. En Madrid, las intensas precipitaciones han obligado a activar la alerta amarilla en la región y han provocado cortes en varias líneas de Metro.
Una incidencia en la explotación ferroviaria que afectaba al sistema de electrificación de la línea de alta velocidad entre Madrid y Barcelona a la altura de la provincia de Guadalajara cortó la circulación de trenes durante la tarde del jueves. Asimismo, Adif informó a primera hora del restablecimiento de la circulación por una vía entre Majarabique y Guadajoz, en la provincia de Sevilla tras sufrir una incidencia con una pieza del sistema de electrificación derribada por el viento.
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