Tras dos semanas en una clínica alemana, el líder de la oposición rusa, Alexéi Navalni, ha despertado del coma inducido. Por el momento, responde a estímulos verbales, pero los médicos todavía no pueden evaluar si le quedarán secuelas después de ser envenenado. Hace unas semanas sufrió un colapso en un vuelo interno en Rusia y estuvo inicialmente internado en un hospital en Omsk, en Siberia.
Navalni fue envenenado por un agente nervioso químico militar del grupo Novichok, similar al utilizado en el intento de asesinato de Sergei y Yulia Skripal en Salisbury el 4 marzo de 2018, según dice el alto representante de la Unión Europea para la Política Exterior, Josep Borrell.
Borrell condena el intento de asesinato a Navalni
Josep Borrell condenó el pasado jueves el intento de asesinato a Alexéi Navalni y pidió una "acción internacional conjunta" en respuesta de lo ocurrido. En un comunicado manifestó que la Unión Euriopea condenaba en los "términos más enérgicos" el intento de asesinato.
Además, señaló que se reservaba el derecho de tomar las acciones apropiadas, "incluso a través de medidas restrictivas". También, subrayó que el uso de armas químicas "es completamente inaceptable bajo cualquier circunstancia, y constituye una grave violación del derecho internacional y las normas internacionales de derechos humanos".
Según Borrell, el Gobierno ruso "debe hacer todo lo posible por investigar este crimen a fondo con total transparencia y llevar a los responsables ante la Justicia".
Dominic Raab ve inaceptable que se haya utilizado un arma química
El ministro de Asuntos Exteriores británico, Dominic Raab, este lunes escribía en su cuenta de Twitter: "Hoy el Reino Unido convocó al embajador d Rusia en el Reino Unido para registrar su profunda preocupación por el envenenamiento de Alexéi Navalni". Raab considera "inaceptable" que se haya utilizado un arma química prohibida y señala que "Rusia debe llevar a cabo una investigación completa y transparente".
