El abogado Jordi Pina ha enviado esta tarde un escrito al juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena para urgirle a decidir antes del viernes si permite a Jordi Sànchez, en prisión preventiva, acudir a su investidura o, de lo contrario, estudian recurrir al Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH).
El escrito de Pina ha sido enviado después de que el Supremo se haya dado un plazo de cinco días para resolver sobre la petición de libertad que Sànchez le ha dirigido para poder acudir al Parlament, al pleno de su investidura convocado para el lunes, día 12, una decisión que amenaza la posibilidad de celebrar la sesión en esa fecha.
Fuentes conocedoras del escrito han señalado que Pina alega que los cinco días que se ha dado Llarena responden a la petición de Sànchez de salir en libertad, pero no hay respuesta a su segunda petición alternativa: ser excarcelado por un día, el próximo lunes, para poder estar presente en su investidura.
Pina ha pedido a Llarena que se pronuncie al respecto antes de este próximo viernes y, en caso de que no lo haga, el abogado se reserva el derecho a pedir al Tribunal de Estrasburgo que adopte de forma "urgente" medidas cautelares que hagan posible la investidura de Sànchez en el pleno del lunes.
Jordi Pina se ha reunido en el Parlament con el presidente de la cámara catalana, Roger Torrent, y con la dirección del grupo parlamentario de Junts per Catalunya (JxCat), cuyo presidente es precisamente Jordi Sànchez.
Ante todos estos movimientos para intentar tener una respuesta de Llarena lo más pronto posible, Torrent no ha anunciado de momento ningún aplazamiento del pleno del lunes.
Mientras tanto, las fuerzas independentistas siguen enfrascadas en sus negociaciones para intentar alcanzar un acuerdo que garantice a Sànchez los votos suficientes para ser investido president.
Este miércoles han proseguido los contactos en el Parlament, aunque fuentes de la CUP han señalado que aún no tienen la última propuesta que les habían prometido JxCat y ERC.
El portavoz adjunto de JxCat en el Parlament, Eduard Pujol, ha pedido a la CUP incorporar "elementos de realismo" en la negociación para hacer posible la investidura de Sànchez y ha explicado que la propuesta de acuerdo que le trasladarán busca conectar con la formación anticapitalista, ya que insiste en que la presente legislatura no tendrá un carácter "autonomista" o de "renuncia", sino que estará enfocada a caminar hacia "un nuevo país".
Sin embargo, horas más tarde y desde Twitter, el jefe de filas de la CUP en el Parlament, Carles Riera, ha explicado que sigue a la espera de recibir la nueva propuesta y ha advertido: "Antes del quién, queremos hablar del qué y del cómo. "Queremos obedecer el mandato del 1-O, hacer el proceso constituyente y políticas de justicia social. Si hemos de hablar de autonomía, no hace falta".
La secretaria general de ERC, Marta Rovira, ha pedido un acuerdo "rápido" entre los partidos independentistas para formar un Govern "efectivo" con un candidato a la presidencia "efectivo".
Desde París, el ministro de Justicia, Rafael Catalá, ha emplazado a los partidos con capacidad de formar gobierno en Cataluña a que "empiecen a pensar en el interés general y en cómo resolver los problemas reales de los ciudadanos". Por su parte, la líder de Ciudadanos en Cataluña, Inés Arrimadas, ha considerado que, al proponer la investidura de Sànchez, los soberanistas buscan hacer "más victimismo" si hay un veto del Supremo y ha atribuido la reacción de ayer de los empresarios alemanes contra Torrent a la "mala imagen" que han creado.
El líder de Catalunya En Comú-Podem, Xavier Domènech, ha opinado sobre Llarena: "Esperamos y creemos que debería dejar que Jordi Sànchez se pudiera presentar, pero sabemos y conocemos por los precedentes recientes que la actitud del Supremo ha ido en línea de limitar los derechos de representación político".
El presidente del PP catalán, Xavier García Albiol, ha pedido a Torrent que desconvoque "hoy mismo" el pleno del lunes, para no chocar con los tempos judiciales.