Grande-Marlaska evita ahondar en la polémica por las grabaciones de Delgado: "Lo importante son los hechos, no las palabras"

El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, no se siente ofendido por su compañera de gabinete Dolores Delgado y ha insistido en que, más allá de las palabras, lo importante son los hechos. Marlaska ha reiterado estas manifestaciones en los pasillos del Senado antes de la sesión de control al Gobierno ante las preguntas de los periodistas, que han querido saber si las grabaciones aparecidas en las que supuestamente la ministra de Justicia le llamaba "maricón" le habían ofendido.

Tras reiterar que lo importante son los hechos y no las palabras, el titular de Interior ha dicho también que Delgado no tenía por qué disculparse, porque para hacerlo se ha tenido que ofender o haber querido ofender.

Además ha hecho hincapié en que el Gobierno actual es feminista y aboga por la igualdad y la diversidad.

Ya por la mañana, Grande-Marlaska había asegurado que el Gobierno es "fuerte" y "cohesionado" pese a las grabaciones que muestran la relación entre la titular de Justicia y el excomisario José Manuel Villarejo. En un acto con la Guardia Civil, el responsable de Interior ha quitado hierro a las grabaciones de 2009 publicadas por Moncloa.com que apuntan a que Delgado mantenía una amistad con el excomisario.

Las últimas revelaciones le salpican de lleno al ministro, ya que se escucha a Delgado, entonces fiscal de la Audiencia Nacional, refiriéndose a Marlaska, exmagistrado de la Audiencia Nacional, con términos homófobos.

El ministro de Interior ha respondido diciendo que ya ha hablado el asunto con su compañera de gabinete y no ha querido ahondar en la polémica, destacando que el Ejecutivo socialista es "fuerte" y "cohesionado".