Mercedes Martín: "La radiación ultravioleta ya alcanza niveles peligrosos en España"

Tenemos alrededor de 300 días de sol al año en España. Sólo nos superan Turquía, Italia, Grecia, Francia y Portugal. Pequeñas dosis de radiación UV son beneficiosas para el ser humano y esenciales para la producción de vitamina D, pero una exposición prolongada puede producir efectos dañinos en la piel, los ojos y el sistema inmune. Nuestros hábitos marcan la diferencia. Según la Organización Mundial de la Salud, "la conducta de las personas con respecto al sol es una de las causas principales del aumento de las tasas de cáncer de piel en las últimas décadas".

Por ello, se creó el índice de radiación UV hace 30 años. El objetivo fue concienciar a la población sobre los peligros de la exposición excesiva al sol, a través de una escala numérica, por colores. La escala va de 1 (riesgo bajo), a 11 o más (riesgo extremo); es decir, del color verde al morado.

Estos días, ya se registran valores altos de radiación UV en todo el país, y muy altos en Canarias. Para el fin de semana, sin embargo, los índices se dispararán en muchas zonas, sobre todo en el interior y sur peninsular. Esto hará que se alcancen valores de 9 en amplias zonas de España.

Qué es la radiación UV y qué tipos hay

La radiación ultravioleta es una parte de la radiación solar, apenas un 7% del total, pero es muy importante porque es la parte más dañina. La región UV del espectro solar se divide en tres bandas: UVA, UVB y UVC. Esta última es la más energética, pero no llega a la superficie terrestre porque es absorbida por el oxígeno. Por su parte, la UVB está atenuada por la capa de ozono estratosférico, aunque es la que más afecta a los seres vivos, y la última, la radiación UVA, es la menos energética, pero tiene importantes implicaciones, como el envejecimiento de la piel. Las cabinas de bronceado emiten más rayos UVA de los que el Sol realmente irradia.

Qué factores influyen en la radiación UV

Las características y la cantidad de radiación ultravioleta (UV) procedente del sol varían según la estación, el clima y la localización geográfica. Su intensidad depende de la inclinación con la que inciden los rayos solares con la superficie terrestre. De ahí que, en España, los picos más elevados se tengan en primavera y verano y entre las 11:00 horas y las 16:00 horas. Es decir, cuando el sol se encuentra más elevado.

No obstante, las condiciones de humedad o la nubosidad son factores que hacen que la intensidad pueda variar de un día para otro, aunque más del 90% de la radiación UV puede atravesar las nubes poco densas.

La altura y la reflexión por el suelo son otros de los factores por los que la radiaciónsolar puede verse modificada. Los aficionados a la montaña deben tener en cuenta que con cada 1.000 metros de incremento en la altitud, la intensidad de la radiación UV aumenta en un 10 a 12%. Dado que, a mayor altitud, la atmósfera es más delgada y absorbe una menor proporción de radiación UV. En cuanto al terreno a explorar, existen diferentes tipos de superficies. Algunas reflejan y otras dispersan los rayos del sol; por ejemplo, la nieve recién caída puede reflejar hasta un 80% de la radiación UV; la arena seca de la playa, alrededor de un 15%; y la espuma del agua del mar, alrededor de un 25%, amplificando los daños en la piel. Por otra parte, el agua dispersa la radiación, pero no la elimina por completo. A medio metro de profundidad en el agua, la intensidad de la radiación UV es aún del 40% de la existente en la superficie.

Consejos básicos sobre fotoprotección

La principal recomendación es evitar la exposición solar en las horas centrales del día y protégete a diario con cremas solares de alta protección. Recuerda que hay que aplicarla en cantidad y entre 10 y 20 minutos antes de la exposición y renovar la aplicación cada 2 horas, aunque el producto sea resistente al agua. Y no dejes de usar gorros y gafas de sol para evitar daños oculares.

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