Los tiempos cambian y las empresas deben adaptarse a las nuevas situaciones, tanto a las generadas a raíz de la crisis de coronavirus como al resto de cambios coyunturales, que los empresarios pueden transformar en oportunidades.

Ante esta situación, según Ibercaja, la empresa del futuro se basará 6 pilares fundamentales que asegurarán su éxito: innovación, digitalización, emprendimiento, transformación cultural, diversidad y sostenibilidad.

Innovación

Consiste en utilizar el conocimiento y el talento para mejorar el mundo, consiguiendo que avance la sociedad, los negocios y el planeta. Para ello, un factor clave es el conocimiento compartido, que se ha producido gracias a la democratización del acceso a la información y la colaboración.

Digitalización

Uno de los errores más comunes es pensar que la digitalización es una cuestión únicamente de tecnología. Nada más lejos de la realidad: la mentalidad, las estructuras y los procesos también están en el corazón de la digitalización. Entendiendo esto, y aprendiendo términos como automatización, nube, asincronía, escalabilidad, algoritmos, amplificación, AR o AI, el éxito está un paso más cerca.

Sostenibilidad

La sostenibilidad implica un compromiso económico, ético y social, que son responsabilidades calve para que una empresa pueda permanecer en el tiempo. Por ello, cualquier empresa o negocio debe de ser consciente tanto de su supervivencia como la de su entorno cada vez que se plantea cómo desarrollar su actividad.

Emprendimiento

El emprendimiento o el intraemprendimiento - que se refiere al hecho de emprender dentro de una organización- son la capacidad actitud de observar el mundo con el foco puesto en las oportunidades y no en los obstáculos para conseguir definir rutas donde otros ven bloqueos. Por ello, se debe fomentar entre las personas que forman la empresa el desarrollo de ese espíritu de búsqueda tan importante.

Transformación cultural

El mayor reto de muchas empresas es ser capaces de abrazar nuevas formas y fórmulas de trabajo a la vez que desarrollan una cultura de empresa propia, atractiva, diferencial, alineada con su propósito, audiencia y perfil de su plantilla.

Diversidad

La diversidad entendida de forma amplia es una realidad que las empresas deben aplicar en su plantilla: de género, generacional, formativa, cultural y religiosa. Está demostrado que esta diversidad mejora resultados, aumenta la creatividad e innovación y la productividad, mejora la imagen hacia los clientes y mejora la retención y atracción del talento.

Diagnóstico empresarial en línea

Para facilitar que las empresas analicen de forma sencilla y eficiente si estos factores clave están implantados y en qué manera, puedes contestar a estas preguntas concretas en esta herramienta de diagnóstico empresarial y recibirás un conjunto de recomendaciones por parte de Ibercaja para ayudar a construir la empresa del futuro.