Historia de Hollywood en la NHL, de pulir el hielo a jugar como profesional y ser el héroe del partido

El deporte deja historias increíbles. El pasado sábado en la NHL (National Hockey League) los Toronto Maple Leafs se enfrentaban a los Carolina Hurricanes cuando los visitantes se quedaron sin los dos porteros por lesión. Ahí es cuando David Ayres, de 42 años, tuvo que dejar la pulidora a un lado para ocupar la portería de los Hurricanes.

En el segundo periodo, por la lesión de ambos porteros, el conjunto de Carolina tuvo que hacer un fichaje de emergencia y Ayres fue el elegido. La liga permite hacer este tipo de fichajes de emergencia ante estas situaciones; le hicieron un contrato por 500 dólares a David.

Realizó una actuación soberbia: detuvo ocho de los diez lanzamientos y acabó ganando Carolina por 6-3. "Jamás había estado en el hielo delante del público", reconoció David a medios locales. Su trabajo lo suele combinar con entrenamientos con un equipo asociado a los Maple Leafes, los Toronto Marlies.

"Es algo increíble. Uno de los jugadores de los Hurricanes me dijo: disfruta. Da igual que te metan 10 goles, sólo disfruta", explica Ayres, que tuvo que retirarse del hockey sobre hielo en 2004 al ser sometido a un trasplante de riñón que le donó su madre. Los jugadores le ovacionaron en el vestuario al término del partido.