Adriano Correia, el lateral del F.C Barcelona, saludando a la afición

Publicidad

ACUERDO CON LA FISCALÍA

Adriano Correia aceptará 14 meses de cárcel por un fraude fiscal de 650.000 euros

Adriano Correia, exjugador de Barcelona o Sevilla, aceptará este martes una condena de 14 meses de cárcel por un fraude fiscal de 650.000 euros tras alcanzar un pacto con la Fiscalía, según fuentes judiciales consultadas por Europa Press.

En base a este pacto, Adriano, jugador del Besiktas JK, reconocerá los delitos y aceptará las penas impuestas en la vista prevista a las 9.30 horas en la Sección Séptima de la Audiencia de Barcelona: la pena de cárcel y dos multas que suman 369.000 euros.

Además, este pacto previsiblemente le permitirá eludir la cárcel ya que la defensa interesará la suspensión de la pena --al no alcanzar los dos años de cárcel-- y la Fiscalía no se opondrá.

Adriano está acusado de dos presuntos delitos contra la Hacienda Pública por valor de 646.086,09 euros, al haber ocultado sus ingresos derivados de la cesión de sus derechos de imagen en 2011 y 2012, cuando jugaba con el club azulgrana.

La Fiscalía pedía inicialmente para él tres años de cárcel y una multa total de 1,1 millones de euros, además de indemnizar a la Hacienda Pública con los 646.086,09 supuestamente defraudados, según el escrito de acusación del fiscal.

El jugador brasileño llegó a España en enero de 2005 para jugar en el Sevilla FC, equipo en el que estuvo hasta que en julio de 2010 fue fichado por el FC Barcelona, y se acogió entonces al régimen especial para trabajadores desplazados a territorio español, que permite tributar como no residentes el año de la llegada y cinco más.

Adriano, que jugó en el Barça hasta que a finales de la temporada 2016 fue traspasado al Besiktas JK, a partir de 2011 estaba obligado a tributar como residente en España por su renta mundial, pero eludió pagar por sus ingresos derivados de la cesión de sus derechos de imagen en 2011 y 2012.

Para ello, según el fiscal, usó un doble mecanismo: ocultó los ingresos derivados de un contrato suscrito con una marca deportiva el 1 de agosto de 2007 y simuló la cesión de sus derechos de imagen "a una sociedad puramente instrumental: Chacun à sa place Comercio Internacional e Serviços", constituida en 2001 en Madeira.

De esta forma, Adriano "se sirvió del ventajoso régimen fiscal de dicho territorio portugués para percibir las rentas derivadas de la cesión de la explotación de sus derechos de imagen al FC Barcelona", dice el Ministerio Público.

Tanto el jugador como el propio club presentaron declaraciones complementarias y además Adriano efectuó varios ingresos a la Agencia Tributaria, con lo que la deuda tributaria ya fue liquidada. El pacto ha sido negociado durante meses entre la Fiscalía y los abogados del futbolista, Diego Artacho, del despacho RCD, y David Aineto, de Aequo Advocats, que también alcanzaron acuerdos para otros jugadores como Javier Mascherano, Angel di María y Alexis Sánchez.

Publicidad