Son células fotovoltaicas basadas en moleculas orgánicas. ¿Se imaginan una fina capa de éste material cubriendo los cristales de nuestras ventanas sin interferir en nuestra visión? Ellas se encargarían de captar la energía necesaria para suministrar luz a la vivienda ahorro sería tremendo.
"La diferencia entre esta nueva tecnología y la de paneles solares es que este material de capa fina puede literalmente vaporizarse encima de cualquier sueperficie y convertirla inmediatamente en un generador de energía", explica el científico Chris Binns.
De este modo, instalado en las ventanas de los hogares, podría producir la energía necesaria para encender las luces de casa, la televisión, el ordenador e incluso la calefacción eléctrica y con un coste mucho menor. Además el impacto medioambiental se reduciría considerablemente.
"¿Que podríamos hacer? Pues convertir nuestras ventanas en centrales eléctricas o, por ejemplo, usar las ventanas de los aviones para recoger energía. Las posibilidades son infinitas", enumera el científico de la Universidad de Leicester.
Para instalarlo sólo sería necesario colocar encima del cristal la lámina de material creado por los investigadores, los cables de transferencia y un controlador del voltaje. De momento se trata de una tecnología recién nacida pero con un gran futuro.