El Cabildo de Tenerife se opone al derribo de 3 inmuebles de la calle Miraflores de Santa Cruz porque consideran que tienen un alto valor patrimonial. Sin embargo, el ayuntamiento capitalino defiende la demolición, porque dice que un informe avala el derribo, entre ellos de la Casa Clavijo.
Edificios que actualmente no están protegidos en el Plan General de Santa Cruz ni tienen valores a conservar según el Centro Internacional para la Conservación del Patrimonio un informe que no gusta al Cabildo y que ahora pide sea complementado por un estudio histórico.
Los propietarios de estos inmuebles han solicitado su derribo están a la espera de la licencia municipal. Una autorización administrativa que el concejal de urbanismo advierte tiene que otorgar.
Licencias que podrían retrasarse si finalmente el Cabildo decide volver a llevar a los tribunales al ayuntamiento para que sea la Justicia quien determine quien tiene competencias para decidir si estos singulares inmuebles tienen o no valor histórico y patrimonial.
Y nos quedamos en Santa Cruz de Tenerife. El Ayuntamiento quiere hacer cumplir la ley de memoria histórica. Se investigarán además de los nombres de las calles, espacios y elementos urbanos que puedan contribuir a la glorificación del franquismo. En la presentación han recordado que Tenerife ha sido el escenario español de la mayor concentración de honores a esta época, en relación a su tamaño. Se ha iniciado una investigación con 56 mil euros de presupuesto. Las conclusiones se presentarán en un año.
