Se investigan las causas en torno a la muerte de un niño de cuatro años en Carrizal de Ingenio, al caerle encima una palmera cuando se encontraba en un campus de verano. El campamento tenía lugar en el Colegio Chano Sánchez, que hoy no ha abierto sus puertas.
Hoy no hay niños, ni alboroto, ni juegos, el sonido habitual en torno al campus de verano que se celebra cada año en el colegio Chano Sánchez. Silencio también en prácticamente todo el municipio, que se ha levantado consternado con la noticia, muy especialmente los padres de los otros niños.
En el entorno de la familia no hay consuelo.
De hecho algunos vecinos aseguran que ya habido casos de palmeras que se han partido en el municipio y que el colegio había solicitado varias veces que esta palmera fuera retirada, algo que niegan en el Ayuntamiento.
Sin embargo, los expertos son tajantes al respecto. Una palmera sana no se rompe como ésta lo hizo.
Ni siquiera expuestas a fuertes vientos. Alertan sobre el peligro de no desinfectar adecuadamente las herramientas de poda y de no realizar controles exhaustivos del interior de las palmeras, muy especialmente las que se encuentran en entornos infantiles y que se consideran prioritarias. Tanto la Guardia Civil como el Consistorio investigan en estos momentos el estado en que se encontraba el ejemplar.
