El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y el de la Generalitat, Carles Puigdemont, han protagonizado en el aeropuerto de El Prat su primer saludo institucional, justo antes de encabezar el acto de homenaje a las víctimas del accidente de Germanwings. El primer encuentro entre ambos se ha producido en la Terminal T2 del aeropuerto barcelonés, en el punto de encuentro de las autoridades que han acudido al acto, antes de dirigirse al lugar de la ceremonia, frente al mural de Joan Miró.
Inmediatamente después Rajoy ha colgado en su cuenta en Twitter la imagen de su apretón de manos con Puigdemont, junto a la ministra de Fomento, Ana Pastor, y la delegada del Gobierno en Cataluña, Llanos de Luna, y ha añadido un escueto mensaje: "En Barcelona. Saludo al president de la Generalitat antes del homenaje a las víctimas del accidente de Germanwings". Ambos han mantenido una breve conversación de cortesía, según fuentes de la Generalitat, antes de dirigirse con toda la comitiva institucional y centenares de familiares de las víctimas al sitio exacto del homenaje.
Rajoy y Puigdemont se han sentado en primera fila, junto a otras autoridades institucionales como la ministra Pastor, la presidenta del Parlament, Carme Forcadell, la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, entre otras. Al final del acto de homenaje a las víctimas, Rajoy y Puigdemont se han vuelto a saludar, en lo que ha sido el primer encuentro entre ambos dirigentes desde que Puigdemont fue elegido presidente de la Generalitat de Cataluña.
El Aeropuerto de Barcelona ha acogido el homenaje a las víctimas del vuelo de Germanwings estrellado en los Alpes el 24 de marzo de 2015 y donde murieron 150 personas --50 españoles--. La Asociación de Afectados del vuelo Germanwings 9525 en los Alpes ha organizado el acto, que ha consistido en descubrir una placa conmemorativa en la terminal T-2 de El Prat. También ha habido ofrendas florales y discursos.
Rajoy ha destacado la solidaridad entre administraciones y también entre países cuando el avión de Germanwings se estrelló hace un año en los Alpes: "Sentí orgullo de la colaboración entre nosotros". En su discurso, ha citado a su gobierno, a la Generalitat, a los ayuntamientos, a los cuerpos de seguridad y de emergencias y a ciudadanos en general, por su "generosidad y entrega". Ha recordado que ese día fue al lugar del accidente junto al entonces presidente de la Generalitat Artur Mas, y allí se encontraron con los primeros ministros francés y alemán, François Hollande y Angela Merkel: "Me sentí muy orgulloso de la colaboración entre países".
Por su parte, Puigdemont ha afirmado que "fue una catástrofe evitable", por lo hay que mejorar la seguridad para "cambiar las circunstancias" que la provocaron. Puigdemont ha indicado que "hoy es un día de duelo y de recuerdo" puesto que "hace un año de una tragedia que hizo que la tristeza se apoderara de nuestro país". "Esta tristeza no desaparecerá, siempre la llevaréis encima", ha apuntado el presidente de la Generalitat dirigiéndose a los familiares, "pero nos hará recordar a todos que -ha añadido- en las peores horas, sale lo mejor de un país". Esto, ha explicado Puigdemont, "lo vimos al producirse esta catástrofe aérea, lo estamos viendo en el accidente de Freginals (Tarragona) o en los atentados de Bruselas".
Al homenaje, en la víspera del primer aniversario del siniestro, han acudido familiares y amigos de las víctimas del vuelo Barcelona-Düsseldorf, así como autoridades y representantes de distintas instituciones. Simultáneamente, el Aeropuerto de Düsseldorf (Alemania) acogerá un acto similar de recuerdo y homenaje por parte de los familiares de las víctimas alemanas.
La Asociación de Afectados del vuelo Germanwings 9525 en los Alpes se creó el año pasado por iniciativa de 46 familias, para defender los derechos de las víctimas, aclarar los hechos, exigir responsabilidades y evitar siniestros como este. El informe definitivo de la Oficina de Investigación y Análisis para la Seguridad de la Aviación Civil de Francia (Bea), publicado este marzo, constata que un médico privado recomendó internar en un psiquiátrico al piloto alemán Andreas Lubitz dos semanas antes de que estrellara el Airbus 320.
